El grupo yihadista Estado Islámico (EI) reivindicó este jueves el atentado de la víspera en Londres a través de su agencia de propaganda Amaq. «El autor del ataque frente al parlamento británico en Londres es un soldado del EI y la operación se llevó a cabo en respuesta al llamado de atacar a los países de la coalición» internacional antiyihadista, indicó Amaq, que citó «una fuente de seguridad».

Es la primera vez que el Estado Islámico reivindica un ataque en Gran Bretaña, país integrante de la coalición internacional dirigida por Estados Unidos.

El miércoles, un hombre vestido de negro, atropelló con un automóvil a los peatones que caminaban por el puente de Westminster, que cruza el río Támesis frente al Big Ben, matando a dos personas e hiriendo a varias decenas. Luego asesinó de una puñalada a un policía en la entrada del parlamento, tras lo cual fue abatido.

La investigación de la policía, que durante la noche detuvo a ocho personas, privilegiaba ya entonces la pista del «terrorismo islamista».

La primer ministra británica, Theresa May, había dicho que el autor del atentado era un británico conocido por el servicio de seguridad interno y que había sido investigado previamente por sus conexiones con la violencia extrema.

En una comparecencia en la Cámara de los Comunes, May informó además que el atentado cerca del Parlamento, dejó heridos de 11 países distintos, incluyendo a 12 británicos.

May dijo que el atentado fue un «ataque contra todas las personas libres» y que el Reino Unido «no tiene miedo», informó la agencia de noticias EFE.

La jefa del gobierno agregó que el atacante, cuya identidad no facilitó, actuó solo. Según explicó, la identidad del agresor es conocida de la policía y por los servicios secretos internos británicos MI5, pero que el caso de este individuo está relacionado con el pasado.

«Fue una figura aislada. Su caso no forma parte de la actual situación de inteligencia. No había (información) de inteligencia previa a este intento (de atentado) o de un complot», señaló la primer ministra ante la Cámara. En su comparecencia, May informó de que entre los heridos hay 12 británicos, tres niños franceses, dos rumanos, cuatro surcoreanos, dos griegos, un alemán, un polaco, un irlandés, un chino, un italiano y un estadounidense.

«Nos reunimos aquí en el más antiguo de todos los parlamentos porque sabemos que la democracia y los valores que conlleva siempre van a prevalecer», agregó la jefa de gobierno conservador.

«Estos valores, libertad de expresión, libertad, derechos humanos, el imperio de la ley, están encarnados aquí, en este lugar, pero son compartidos por gente libre de todo el mundo», añadió. «Este ha sido un ataque -resaltó- contra gente libre de todas partes y, en nombre del pueblo británico, quisiera dar las gracias a nuestros amigos y aliados en todo el mundo que han dejado claro que están con nosotros en este momento», dijo.

Antes, el ministro británico de Defensa, Michael Fallon, dijo que el gobierno y las fuerzas de seguridad trabajan sobre la base de que el atentado está «ligado al terrorismo islamista», reiterando lo dicho ayer por el jefe de la unidad antiterrorista de la policía de Londres.

En el ataque, el agresor lanzó su automóvil contra los viandantes que caminaban por el puente de Westminster, se estrelló después contra la verja que rodea el Parlamento y recibió varios disparos tras acuchillar a uno de los policías que custodiaban el edificio.

Cuatro personas murieron en el atentado, incluidos el agresor, un policía británico de 48 años, Keith Palmer, otro varón de entre 40 y 50 años, y una mujer de 43 años. La prensa española identificó a la mujer como Aysha Frade, que tenía nacionalidad británica aunque era de origen gallego.