La primera semana post electoral en Brasil estuvo marcada por los focos de protesta del bolsonarismo más radical que no aceptó la derrota y por el tardío y ambiguo discurso de Bolsonaro, que finalmente terminó reculando y abriendo paso al proceso de transición. En diálogo con Tiempo, Humberto Costa, senador por el PT y exministro de Salud de Lula, analiza el enmarañado período que se abre hasta la asunción del 1° de enero, qué características tendrá el próximo gobierno y cómo impacta en América Latina el regreso de una figura clave en la política regional de las últimas décadas.

-¿Cómo evalúa las respuestas del bolsonarismo tras las elecciones, tanto de los bloqueos de ruta y los llamados a un golpe militar como las palabras del propio Bolsonaro? ¿Hasta dónde cree que llegarán en su intento de dificultar la transición?

-Creo que las respuestas están en la misma línea de lo que Bolsonaro ha practicado durante todo su mandato: una actitud claramente golpista, un cuestionamiento permanente a las instituciones y el irrespeto a la independencia de poderes. En suma: un conjunto de políticas autoritarias. Entonces están haciendo lo que hicieron durante estos cuatro años, incumpliendo la Constitución y atacando a los poderes constituidos. Creo que la transición será un tanto difícil, aunque eso lo sabremos mejor luego de estas primeras reuniones que comenzaron entre los equipos de Lula y Bolsonaro.

-¿Cuáles fueron las claves de la victoria de Lula?

-La clave principal es su propia representatividad política, la fuerza social que tiene y su legado, las cosas que ha construido en sus dos gobiernos. Difícilmente otro político opositor podría haber ganado estas elecciones porque tuvimos que pelear no solo contra un candidato sino contra todo el aparato del Estado. Bolsonaro utilizó todos los recursos, incluso ilegales, millones de reales distribuidos de varias formas a diversos sectores, esto sumado a la utilización permanente de injurias y noticias falsas. Entonces creo que la principal clave ha sido la figura de Lula, su dimensión política y lo que ha hecho por el país.

-¿Qué podemos esperar del próximo gobierno? ¿Veremos a un Lula más audaz o más moderado? ¿Cuánto condicionará la amplia alianza que debió armar para ganar y la fortaleza del bolsonarismo en el Congreso y en las gobernaciones?

-Podemos esperar un gobierno con características de unión nacional. Brasil está profundamente dividido, estas fuerzas de la extrema derecha han creado un clima de mucha confrontación y violencia. Entonces, la primera preocupación del presidente es buscar la unidad nacional para superar este momento porque todo el tiempo durante el gobierno de Bolsonaro vivimos una situación profundamente difícil, por momentos bizarra, y ahora tenemos que llevar el país a una situación de mayor normalidad.

Para esto vamos a necesitar hacer una gran alianza política, y creo que el gobierno va a simbolizar esa alianza. Muchas fuerzas de centro, incluso de centro derecha, van a participar del gobierno, y también vamos a intentar lograr una mayoría tanto en la Cámara de Diputados como en el Senado para poder aprobar las principales medidas que Lula buscará, como poner fin al hambre o destinar mayores recursos para mejorar la situación del empleo. Entonces, en síntesis, creo que Lula buscará formar un gobierno de unidad nacional.

-¿Qué impacto tiene en América Latina el regreso de Lula? ¿Cree que podrá ocupar el lugar de liderazgo regional que quedó vacío tras la partida de Chávez?

-Creo que Brasil, por su dimensión y su importancia política, naturalmente va a tener un papel importante para la integración de Latinoamérica, y al haber hoy otros gobiernos con preocupaciones progresistas, podremos avanzar hacia una integración mucho más fuerte. Creo que Brasil, Argentina, Chile, Colombia, Bolivia, Honduras y México pueden establecer un gran espacio de entendimiento, de integración, de acción conjunta en política internacional, en relaciones económicas. Y este será el principal papel de Lula, tal vez no de ocupar un rol de liderazgo pero sí de participar y contribuir para que esta integración ocurra. «