Con el mismo sentido de la oportunidad que muestran en otras partes del mundo algunos miembros de la Justicia, la Policía Federal brasileña -que cumple tareas de investigación judicial- inculpó el viernes al expresidente Lula da Silva de beneficiarse de los sobornos de algunas de las empresas de la trama de Petrobras.

La Policía Federal recomendó acusar a Lula por la presunta adquisición de un apartamento en Guarujá y una chacra con la colaboración de la empresa OAS, involucrada en esa trama de corrupción.

Lula ya fue acusado por intentar obstruir las investigaciones de la Lava Jato.

Según la policía, Lula y su esposa «fueron beneficiarios de ventajas ilícitas por parte de la constructora OAS, en valores que alcanzaron los 2,4 millones de reales», unos 750.000 dólares al cambio actual.

Lula siempre negó las acusaciones.

El apartamento habría sido comprado por la OAS y reformado para Lula. Las autoridades investigan además la mudanza de Lula después de dejar el poder.