La Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) elevó este martes a 660.000 el número de personas que abandonaron Ucrania hacia países vecinos desde el inicio de la operación militar de Rusia y un millón los desplazados internamente.

«Tenemos ahora más de 660.000 refugiados que huyeron de Ucrania a países vecinos en los últimos seis días», afirmó la vocera Shabia Mantoo a la prensa en Ginebra, citada por la agencia de noticias AFP. «A este paso, la situación parece camino a convertirse en la crisis de refugiados más grande de Europa en este siglo», agregó.

El ejército ruso bombardeó el centro de Jarkov, segunda ciudad más poblada de Ucrania, dejó sin luz la estratégica localidad portuaria de Mariupol y mantiene el asedio de Kiev, en el sexto día de invasión que el Kremlin anunció que continuará «hasta lograr los objetivos», pese al inicio del diálogo y la presión de las sanciones.

Los proyectiles contra Jarkov impactaron los edificios gubernamentales ubicados en la plaza principal, denunció el gobernador regional, Oleg Sinegubov, que calificó el ataque como «criminal».

El dirigente acompañó la acusación con un video, que ya circula por las redes sociales, en el que se ve un misil que cae contra el edificio administrativo, lo que provoca una gigantesca explosión en momentos en que circulaban varios autos por la zona.

Rusia rechazó «categóricamente» las acusaciones de perpetrar crímenes de guerra en Ucrania, en respuesta a las declaraciones del fiscal de la Corte Penal Internacional (CPI), Karim Khan, sobre el inicio “lo antes posible” de una investigación.

«Lo rechazamos categóricamente. Rusia no es miembro de la Corte Penal Internacional», dijo el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, y manifestó que los informes sobre el presunto uso de bombas de racimo y termobáricas por fuerzas rusas no son reales.

«Es una noticia falsa», dijo el vocero en declaraciones que reproduce la agencia de noticias Sputnik y, al igual que el resto de los funcionarios del Kremlin, indicó que las fuerzas rusas no bombardean obras de infraestructura ni barrios residenciales.

La OTAN no enviará tropas a Ucrania

El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, acusó este martes al presidente de Rusia, Vladimir Putin, de haber «destrozado» la paz en Europa con el ataque «inaceptable» perpetrado con Ucrania, y descartó la posibilidad de que la Alianza Atlántica envíe cazas de combate a la zona de conflicto.

«El presidente Putin destrozó la paz en Europa y los aliados condenan la brutal e injustificada invasión contra Ucrania», afirmó Stoltenberg en declaraciones desde Polonia donde se reunió con el presidente, Andrzej Duda.

«El ataque ruso es por completo inaceptable, y fue facilitado por Bielorrusia», añadió Stoltenberg durante una visita a la base aérea polaca de Lask.

El economista y político noruego defendió las duras sanciones aprobadas contra Rusia por los aliados y el apoyo militar y humanitario a Kiev, pero enfrió la posibilidad de ir más allá: «La OTAN no va a ser parte del conflicto», subrayó.

Boicot a canciller ruso en Ginebra

El canciller ruso, Serguei Lavrov, enfrentó dos boicots al intervenir en dos foros internacionales organizados por la ONU, reflejo del aislamiento diplomático encabezado por algunas potencias occidentales hacia Moscú en rechazo a la invasión militar en Ucrania.

Varias delegaciones, entre ellas la de Ucrania, salieron de la sala durante la intervención de Lavrov en la Conferencia de Desarme que se desarrolla en Ginebra, en solidaridad con el país atacado y cuando comenzaba su discurso.

El ministro ruso tenía previsto viajar a la ciudad suiza, pero anuló su visita ayer invocando las sanciones que le prohíben sobrevolar la Unión Europea (UE) en represalia por la ofensiva.