La concentración fue en la Plaza Baquedano del centro de Santiago, convocada por la Central Unitaria de Trabajadores. La intención era celebrar el Día del Trabajador y asistieron algunos centenares con pancartas y banderas, además de los consabidos barbijos, a pesar de que el gobierno reiteró poco antes la prohibición de “concentraciones de más de 50 personas durante el estado de emergencia decretado por el coronavirus”. Así, cuando comenzaba el acto, llegaron los carabineros y sin mediar, empezaron a reprimir. La acción fue violenta y la conclusión, 57 detenidos, entre ellos, dirigentes sindicales de la CUT y varios trabajadores de prensa, algunos de los cuales estaba ejerciendo sus tareas para TVN y Canal 13, También fue detenido un camarógrafo de Prensa Latina. Incidentes similares se registraron en Valparaíso.

De inmediato, desde los organismos de DDHH, sindicatos, organizaciones sociales y de periodistas censuraron la acción de la policía y exigieron la inmediata liberación de los detenidos. Diez de ellos eran dirigentes de la central obrera, entre ellos, su presidenta, Bárbara Figueroa y Juan Moreno, líder del sindicato de SIL Walmart. Durante la jornada, finalmente, fueron recobrando su libertad, mientras que el general Enrique Bassaletti, jefe de Zona Metropolitana Este, adujo que los periodistas “no estaban todos con sus credenciales y estaban con teléfonos celulares y por lo tanto lo que corresponde en ese caso es cerciorarse efectivamente su calidad de periodistas”.

Mientras, el gobierno chileno admitió que en la jornada de ayer se quebró el record del millar de nuevos contagiados, que ahora se acercan a los 19000, mientras que los fallecidos no superan los 250.