Kuala Lumpur

Un potente tóxico identificado como VX y catalogado como «arma química», causó la muerte en Malasia de Kim Jong-nam, hermano mayor del líder norcoreano, Kim Jong-un, informaron  las autoridades malayas, que ahora centran la investigación en cómo el veneno llegó al país.

Así lo señala un informe preliminar -citado por las autoridades policiales malayas y realizado por el equipo del Departamento de Química de la Policía- tras una investigación que permitió encontrar rastros de ese agente nervioso en el rostro y ojos del fallecido, informaron las agencias de noticias Reuters y EFE.

Un grupo de investigadores de la policía rastreó los lugares donde dos sospechosas detenidas por el crimen manipularon el VX antes de restregar con el tóxico con un pañuelo en la cara de Kim Jong-nam el pasado 13 de febrero en el aeropuerto de Kuala Lumpur.

El inspector general de la Policía, Khalid Abu Bakar, afirmó que una de las mujeres bajo custodia tuvo «vómitos» y otros síntomas de envenenamiento tras lo sucedido, pese a lo cual llamó a la calma y aseguró que no hay peligro para los usuarios de la terminal 2, donde ocurrió el incidente.

«Aún no lo sabemos si el VX fue fabricado o introducido en el país. Tratamos de averiguarlo, pero si fue una cantidad muy pequeña, hubiera sido difícil de detectar», dijo el oficial a los medios, informa el diario malayo The Star. El VX, catalogado como un arma química por la ONU, es un líquido aceitoso incoloro, inodoro e insípido, y está considerado como uno de los agentes nerviosos sintetizados más letales.

Kim Jong-nam murió rumbo al hospital pocas horas después de ser envenenado por esta arma química, utilizada en la guerra entre Irak e Irán en la década de 1980 y cuya producción está prohibida.

Las autoridades malayas continúan identificando a la víctima como un «ciudadano norcoreano», a la espera de que un familiar reclame el cadáver para comparar las muestras de ADN. El Gobierno de Corea del Sur ha insistido desde el primer momento en que Kim Jong-nam fue asesinado por el gobierno de Pyongyang, y calificó el crimen de «acto terrorista».

La Policía malaya arrestó a un químico norcoreano y a las dos mujeres que acorralaron y abordaron a la víctima, una vietnamita y una indonesia, al tiempo que cursó órdenes de arresto contra otros cuatro norcoreanos que supuestamente reclutaron a las atacantes para impregnar con el químico a la víctima.

Se cree que esos cuatro sospechosos -Hong Song Hac, Ri Ji Hyon, O Jong Gil y Ri Jae Nam- huyeron de Malasia el mismo día del supuesto crimen y se encuentran en Pyongyang.

Las autoridades pidieron a la embajada norcoreana en Kuala Lumpur que les permita entrevistar a otras dos personas: Hyon Kwang Song, el segundo secretario de la legación diplomática, y Kim Uk Il, empleado de la aerolínea estatal Air Koryo.

Según las investigaciones, ambos despidieron en el aeropuerto de Kuala Lumpur a los cuatro sospechosos norcoreanos el mismo día del crimen. El cónsul norcoreano, Kim Yu Song, dijo que hasta el momento no han recibido ninguna citación.

«El embajador (norcoreano) ha sido informado del proceso, pero continúa con sus delirios al expresar mentiras y acusaciones», señaló en rueda de prensa el ministro de Asuntos Exteriores malasio, Anifah Aman. El ministro malasio remarcó que las autoridades están realizando una investigación «objetiva, imparcial y transparente», y refutó las acusaciones del gobierno norcoreano, que responsabiliza a Malasia por la muerte de un diplomático de su país bajo el nombre de Kim Chol.

Este nombre coincide con los documento de viaje de Kim Jong-nam, quien además tenía un perfil en la red social Facebook, ahora clausurado, con este seudónimo. Kim Jong-nam nació en 1971 de la relación entre el difunto líder norcoreano Kim Jong-il y la que fuera su primera concubina, la actriz Song Hye-rim.

En su momento estuvo considerado como el mejor posicionado para suceder al padre, pero cayó en desgracia en 2001, tras ser detenido en Japón con un pasaporte dominicano. En los últimos años vivió exiliado en China, y en 2012 atrajo la atención por sus críticas a Pyongyang y su sistema de sucesión.