Los actores salieron a la calle y tomaron la palabra esta vez para contar cuales son las problemáticas que atraviesan su profesión.

Durante cinco horas, la radio abierta que se instaló frente al Congreso de la Nación tuvo la visita no sólo de artistas, sino también de políticos y dirigentes sociales que acercaron su solidaridad a los trabajadores que tuvieron como consigna central la defensa a la cultura nacional y los puestos de trabajo.

Las voces fueron pasando a lo largo de la tarde explicando cuáles son los principales reclamos. “Es una vergüenza que no se estén realizando los aportes de nuestra obra social”, planteó desde el micrófono de la radio el actor Santiago Ríos.

Por su parte, Daniel Alvaredo expresó, “nunca se reguló el cine a pesar de que ya hace un año sacaron a Alejandro Cacetta en una operación de prensa que no debemos olvidar. Dicen que a la gente no le gusta el cine argentino pero si no se lo exhibe no se conoce y por lo tanto no hay posibilidades de que la gente tenga alguna opinión al respecto”.

La actriz María Laura Cali (protagonista del film Necronomicón), sumó su voz. “No sólo tenemos menos financiamiento, sino que también tenemos menos salas para exhibir nuestras películas, eso significa cada vez menos trabajo para actores y trabajadores del medio”.

El reclamo que encabezó actores abarca todo el sector teatral y audiovisual. Sin embargo, apuntó concretamente a la necesidad de más puestos de trabajo y el cumplimiento de la Ley de Actores que fue aprobada en 2015 pero reglamentada de forma tal que hoy perjudica al medio actoral.

La ley 27.203 brinda derechos básicos para todos los trabajadores: jubilación, licencia por enfermedad, accidente laboral, aguinaldo y asignaciones familiares pero desde el mismo gremio reclaman que a la hora de reglamentarla cambiaron su sentido y fueron favorecidos los empresarios antes que los actores. La situación provocó que se multiplicaron (entre los pocos puestos de trabajo) los contratos precarios. La AAA recibe constantemente denuncias por parte de los actores.

En ese sentido, el diputado Daniel Filmus participó también de la radio. “Estamos para expresar la solidaridad y el apoyo a los actores. Vamos a trabajar para alcanzar los objetivos que se están planteando. Presido la comisión de cultura en diputados donde vamos a pedir explicaciones acerca de cómo se reglamentó esa ley”, dijo a modo de compromiso el actor.

“Me resulta difícil pedir trabajo para los actores argentinos con esta cara”, dijo entre bromas Chang Sung Kim quiene además, hizo alusión a la necesidad de construir y fortalecer la formación artística a través de la producción.

Hugo Arana, Juan Palomino, Lola Berthet, Celina Font, Alejandra Fiorentino, Héctor Bidonde, Daniel Valenzuela, Alejandra Darín, Sergio Boris, entre otros, pasaron la tarde hablando con el público, explicando la situación en el desarrollo del trabajo.

“Cumplo 61 años en esta profesión y es más que una fuente de trabajo”, expresó Miguel Jordan. “Es el momento de pelear y exigir más trabajo. Las generaciones tienen que apoyar este emprendimiento de la asociación de actores”.

Entre los entrevistados en la radio abierta estuvo el actor César Arakaki, quien durante la represión del 14 de diciembre fue detenido. Arakaki expresó que fue clave el acompañamiento del gremio en su detención y la solidaridad de todos sus compañeros. Denunció además que esa detención contribuyó a que perdiera su trabajo en la tira Simona.

A mitad de la tarde, Sergio Maldonado se sumó también a los micrófonos de la radio. “Venimos a apoyar porque ustedes siempre estuvieron presentes en el reclamo por Santiago, la ficción argentina tiene un lugar irremplazable no sólo por lo que se ve en la pantalla si no también detrás de ella, todo el trabajo que genera”.

Junto a él, Lita Boitano expresó. “No podemos sacarle el cuerpo a nada. Venimos a acompañar a los actores como lo hicieron ellos siempre. Como hemos salido a la calle por Santiago Maldonado que para las madres es un pedacito de nuestros hijos”.

Hacia el final del encuentro, Alejandra Darín planteó que el reclamo es demasiado amplio y que lo más importante es tener en claro que es un reclamo cultural. “La Asociación tiene dos tareas: crear conciencia. Podemos elegir cómo vivir y tenemos que saber que para vivir bien todos tienen que estar bien”.