Luego de un confuso episodio que derivó en una manifestación frente a las puertas de la comisaría 5ta de Villa Diamante, partido de Lanús, el Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE) denunció que efectivos de la policía local irrumpieron en forma violenta en el merendero «Cartoneritos», ubicado en Murgiondo 622, en el barrio Eva Perón de la localidad de Villa Caraza, y «reprimieron a mansalva» a niños y adolescentes, arrojaron gas pimienta dentro del lugar y «rompieron» el comedor, llevandose al menos a dos jóvenes que permanecieron varias horas con paradero desconocido y que, paradójicamente, denunciaron esta madrugada a sus captores en esa misma comisaría.

Militantes del MTE y el dirigente nacional de la Confederación Nacional de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP) Juan Grabois responsabilizaron al secretario de Seguridad municipal Diego Kravetz y al intendente Nestor Grindetti, de Cambiemos, por lo sucedido, marcaron una campaña de hostigamiento e infiltración a las organizaciones en ese territorio, y reclamaron sanciones para los efectivos involucrados en el operativo.

Ante la creciente manifestación vecinal, Kravetz, por su parte, aseguró en la madrugada del viernes que «no hubo represión» en el operativo. Sin embargo, circulan en redes sociales testimonios en videos y audios donde integrantes del merendero exhiben cartuchos de balas de goma, presuntamente utilizados en el operativo.

Aparentemente, todo comenzó pasadas las 20 de la noche del jueves, cuando las personas que acuden al comedor comunitario se disponían a comer. En esos momentos se roduc+ia en los alrededors una persecución policial, los integrantes del comedor que salieron “a ver qué pasaba” y luego los hechos que según los denunciantes, terminaron en represión.

“Se estaba realizando el comedor comunitario que sostienen los compañeros desde hace mucho tiempo, donde comen cien chicos todos los días” narró el militante del MTE Juan Martín Carrenco.
“Y después de un confuso episodio con la policía local con una persona que no es de nuestro grupo, no es del comedor por supuesto, y que supuestamente venían persiguiendo, las compañeras salieron a ver qué pasaba y eso terminó en represión, donde hay chicos lastimados, donde se tiró gas pimienta adentro del comedor, y la verdad que quedamos consternados y esperando la aparición de dos compañeros que fueron secuestrados, es la palabra más precisa, porque no sabemos todavía dónde están, y estamos esperando en la puerta de la comisaría”, contó Carrenco. “Para que alguien de la fuerza, y sobre todo el intendente Grindetti y el secretario de Seguridad municipal Diego Kravetz, den una respuesta”, insistió.

Fuera de la comisaría 5ta, las palmas, los bombos y hasta una fogata nocturna, se multiplicaban. María Saracho, cocinera del comedor comunitario, mostraba los cartuchos en sus manos. “Soy cocinera de 70 chicos menores de 7 y 8 años, y después hay personas grandes, como cien, en la calle formando fila para llenar una olla de vianda para comer en su casa. ¿Te parece a vos que tenía que entrar así la policía sin traer una orden, y yo resguardando mis criaturas? Me tiró todo el gas pimienta adentro de la comida”, cuenta en un video que circula en las redes. Y muestra, en el suelo, comida tirada. “Por qué tenían que ir el intendente con esos pitufos (NR: apodo de la policía local por sus boinas azules) a tirar con pistolas 9 milímetros y tirar con escopetas?” preguntó. Cuenta que a su hija la envió a una clínica, con pérdidas, porque está embarazada de dos meses, que hay otras compañeras también encinta, que se fueron a sus casas. ¿”Te parece que la policía les llegue a empujar, a patear, a derramarle gas pimienta?”, volvió a preguntar.

Juan Grabois acudió a a comisaría por los dos jóvenes, Maximiliano Rodríguez y Nahuel Maidana, que la policía se llevó y que habría mantenido varias horas sin dar a conocer su paradero. “Queremos saber dónde están los chicos. No me permiten ejercer mi profesión (de abogado), no puedo ejercer el derecho a la defensa porque no sé dónde están, no los pude ver, no pude constatar sus condiciones físicas”, denunciaba Grabois ante los medios alrededor de las diez y media de la noche. Horas después los jóvenes fueron liberados y, acompañados por Grabois, efectuaban la denuncia en la misma comisaría en la madrugada del viernes.

El dirigente de CTEP fue contundente al describir y analizar lo sucedido. “La policía local de Lanús, liberada por (el secretario de Seguridad municipal) Diego Kravetz, que según testimonios estuvo en persona ahí, fueron a hacer un operativo de represión absoluta en un comedor comunitario del Movimiento de Trabajadores Excluidos, como parte de una campaña de hostigamiento que este delincuente común de Diego Kravetz, apañado por (el intendente Néstor) Grindetti y otros políticos, está realizando contra los movimientos sociales en Lanús, infiltrando gente en las organizaciones, generando situaciones de violencia, y esto tiene que parar”, dijo Grabois a Tiempo.

Kravetz, abogado, ex diputado de la Ciudad de Buenos Aires entre 2003 y 2011 e integrante del Frente para la Victoria hasta el año 2009 y que actualmente se desempeña como secretario de Seguridad en la administración de Cambiemos que gobierna Lanús, mientras tanto, por el canal C5N aseguró que “no hubo represión”, que “si es una situación no deseada, no se quiso ni se reprimió a nadie” e insistió con que “fue un operativo de prevención”.