–Una de las principales referentes del gobierno al que ustedes apoyan públicamente les pidió inversiones fuertes. ¿Cómo lo tomó?

–Bien porque fue con altura. Es verdad, nos hacen falta inversiones y tengo la impresión de que se están realizando. No al ritmo que todos esperamos, pero eso lo marca el mercado. En la medida en que el mercado no expande…

–¿Cómo se hace para propiciar esa expansión?

–El año pasado el presidente reconoció que la Argentina merece un mapa fiscal y un esquema fiscal diferente y que está trabajando en ello. También mencionó los costos de logística y dijo que están mejorando los ferrocarriles y las autovías. Todo eso se va a dar en el esquema de gradualismo que plantea el gobierno y las inversiones van a ir respondiendo.

–Mucha gente cree que Macri va a perder las elecciones por la economía. ¿Qué piensa?

–Yo, la verdad, no estoy tan seguro. Todo el mundo dice que sí, pero yo no lo sé. Creo que el ser humano… Quiero pensar que no solamente vamos a votar con el bolsillo sino con la esperanza de cómo queremos que vivan nuestros hijos.

–La percepción tiene que ver con el malestar que generaron la depreciación del salario y la pérdida de poder adquisitivo…

–Le pongo un ejemplo: si hay subsidios energéticos puedo ampliar el consumo porque hay más dinero en el bolsillo, pero después tengo que pagar el triple y estoy castigando a las generaciones que vienen. Yo quiero pensar que la gente que vive inundada, con problemas gravísimos de seguridad o salud, en este momento piense y diga «yo quiero y necesito algo para mis hijos y lo que no haga hoy no lo van a tener mañana». Confío en que no se va a votar con el bolsillo.

–En el gobierno anterior hubo una Ley de Defensa de la Competencia supuestamente orientada a contener los abusos de los formadores de precios. Esa ley fue muy resistida por las empresas y nunca se reglamentó. Ahora hay un proyecto de la diputada Carrió en el Congreso ¿Qué expectativa le genera?

–Yo creo que la Ley de Defensa de la Competencia que está vigente tiene todo lo necesario para garantizar la competencia y que en los mercados pueda haber absoluto y pleno juego de todas las variables de la libre competencia. Depende mucho de las condiciones y de la seriedad con la que se hagan los trabajos y los estudios.

–Se lo pregunto porque la caída del consumo tiene que ver, por ejemplo, con la inflación y, a su vez, los aumentos de precios se relacionan con la acción de monopolios o son causa de mercados que están bajo cartelización de determinadas empresas.

–Los monopolios son un problema en todos los países del mundo, pero también es cierto que se pueden administrar. Es decir, en muchos países los monopolios compiten contra otros monopolios; las políticas les han servido para generar competencia entre ellos y evitar que se cartelicen, lo que a su vez generó una competencia de segundo grado. Los monopolios son parte de la historia del mundo, hay que convivir con ellos. Lo ideal sería que no estuvieran pero están. Hay que regularlos. «