El fallo de la Corte Suprema que beneficia con el 2×1 a condenados por crímenes de lesa humanidad «puede tener implicancias en la lucha por desterrar la impunidad en Argentina», aseguró Paola García Rey, directora de Promoción y Protección de Derechos Humanos en la oficina local de Amnistía Internacional.
García Rey explicó que «la ley del 2×1 vino a atender una crisis carcelaria muy concreta en un período específico, desde 1994 a 2001, con resultados muy cuestionables, pero que entendemos no puede aplicarse por una adaptación del principio de ley penal más benigna, para en este caso brindar un beneficio de salida anticipada a uno de los represores». Además, destacó «la solidaridad que se genera a nivel internacional», lo que demuestra que «hay ciertos debates en los que no estamos dispuestos a retroceder».

«El fallo de la corte representa un retroceso a partir de lo que ha sido históricamente la lucha de Argentina por la memoria, verdad y justicia», agregó, al tiempo que celebró que «todo el espectro político haya salido a separarse de la decisión de la Corte, ya que nos garantiza que la línea histórica de Argentina en este contexto va a seguir manteniéndose y vamos a estar muy alertas para que eso siga así».

Finalmente, García Rey advirtió que «siempre estamos abiertos a debatir, consultar y revistar, pero nunca a dar marcha atrás a victorias que fueron conquistadas legítimamente que tienden a respetar derechos humanos».