El tercer objetivo de las Naciones Unidas y de la Organización Mundial de la Salud, planteado para el año 2030, es garantizar una vida sana y promover el bienestar para todos, en todas las edades. Se trata de una ambiciosa declaración que, hace escasos días, fue reivindicada en más de 35 países durante la celebración mundial del Día del Ayurveda. Bajo el lema que su puesta en práctica puede ayudar a la búsqueda de una salud plena, académicos y especialistas de diversas disciplinas destacaron la importancia de la difusión de los preceptos de esta medicina milenaria.

El Ayurveda, o ciencia de la vida, está reconocido por la OMS como uno de los dos sistemas médicos tradicionales vigentes más antiguos de la humanidad. En la India tiene un gran desarrollo, con 3.200 hospitales, 43.000 camas y más de 400.000 médicos que deben estudiar cinco años y medio para graduarse en la especialidad.

Es una medicina viva que, por su concepción y su metodología, se integra con las prácticas médicas modernas, complementando sus aportes y soluciones en un marco de respeto por la persona y la naturaleza. Promueve la observación y la investigación científica, la cual ha permitido corroborar muchos de sus postulados y recomendaciones. El Ayurveda es considerado efectivo en la prevención y la cura de enfermedades, la preservación de la salud y la promoción de la longevidad.

La celebración en Buenos Aires del día de esta medicina ancestral fue organizada por la Fundación de Salud Ayurveda Prema. Con la invitación de la Embajada de la India se realizaron tres presentaciones ante médicos, profesionales y personas interesadas en la disciplina.

A partir del relato de una serie de anécdotas familiares, el embajador de la India, Dinesh Bhatia, contó que en su país el Ayurveda forma parte de la vida cotidiana de toda la población.

Gustavo Canzobre, de la Fundación Hastinapura, explicó que el Ayurveda es parte del legado de la sabiduría védica hacia el mundo, de una tradición viviente que da sentido a gran parte de la realidad de la India actual. “Antes de entregar al mundo el Yoga y la meditación, India ha producido alguno de los avances científicos más importantes para la humanidad: en el campo de las matemáticas, con el descubrimiento del cero como concepto matemático, que permitió el desarrollo del sistema decimal, que nos legaron a través de los árabes; numerosas nociones astronómicas, médicas, lógicas; la gramática sánscrita, la más antigua y única científica hasta el siglo 19; la música, etc”, destacó el reconocido sinólogo.

“La noción central de la sabiduría védica – agregó Canzobre – es la unidad de la vida, y el propósito de la existencia es tomar conciencia de la misma. Así lo enseñan las escrituras védicas llamadas Upanishads, y puede sintetizarse con el primer mantra del Isha Upanishad: todo en el universo está cubierto y penetrado por la Realidad Sagrada, del Espíritu Supremo, de Dios. De esta conciencia de la vida como una gran unidad, que es sostenida como un hilo que une y da forma a un collar de perlas, derivan todas sus nociones filosóficas y espirituales, y todas sus aplicaciones sociales y científicas, entre ellas el Ayurveda”.

“Éste, como ciencia (veda) de la vida (ayur) parte del concepto de salud, svastha, como el estado en que se está en armonía con la propia naturaleza. Y por lo tanto es uno de los medios a través del cual se concreta el propósito del yoga: debemos desarrollarnos espiritual, psicológica, energética, social y físicamente, trayectoria sintetizada en uno de los mantras clásicos de la India: «llévame de lo aparente hacia lo real; de lo impermanente hacia lo permanente; de la muerte a la inmortalidad”, concluyó Canzobre.

El director de la Fundación de Salud Ayurveda Prema y experto de la OMS sobre el Ayurveda, doctor Jorge Berra, señaló que los principios de esta medicina milenaria son aplicables a todas las personas, en todas las naciones, y que este sistema tiene una mirada completa sobre el cuerpo, la mente y los aspectos sutiles de las personas.

“El Ayurveda – señaló el doctor Berra – puede ayudar a resolver las enfermedades crónicas no transmisibles, que hoy explican en la Argentina el 82% de las causas de muerte y que están causadas por el estilo de vida. En el Congreso de la Nación, tanto en las Cámara de Diputados como en la de Senadores, hay diferentes proyectos de ley para el reconocimiento del Ayurveda, tal como ya ocurre en otros países de la región como Brasil y Colombia”.

Finalmente, el experto destacó el respeto por las incumbencias profesionales y laborales de los miembros del equipo asistencial ayurvédico, al tiempo que informó que la Fundación de Salud Ayurveda Prema, que preside, dicta cursos desde hace veinte años, con la certificación conjunta de diferentes universidades o la Asociación Médica Argentina.