La Paz,

Un tribunal de Bolivia condenó a 15 años de prisión al ex gobernador opositor de la región amazónica de Pando, Leopoldo Fernández, como responsable de la muerte de 13 campesinos por un violento conflicto político ocurrido en 2008.

Tras seis años de juicio, el juzgado Sexto de Sentencia del Tribunal Departamental de La Paz comunicó la resolución de condena a Fernández, que se encuentra detenido preventivamente desde hace ocho años, la mitad de ellos con arresto domiciliario.

El presidente Evo Morales consideró exigua la pena, a punto tal que afirmó que el tribunal «perdonó» a Fernández.

El caso se remonta al 11 de septiembre de 2008, cuando murieron nueve campesinos simpatizantes del presidente Evo Morales y dos funcionarios opositores de la gobernación, tras violentos enfrentamientos en la localidad de Porvenir, de los que el gobierno nacional culpó a Fernández.

En los días siguientes, en medio de operativos por restablecer el orden, también murieron un pastor evangélico y un soldado, con lo que la cifra de fallecidos por el conflicto subió a 13. El gobierno y la Fiscalía sostuvieron que Fernández ordenó a varios funcionarios de la gobernación cavar zanjas para impedir el avance de una marcha de campesinos que se acercaba a la capital de Pando, Cobija, lo cual provocó el violento enfrentamiento.

La abogada de la acusación, Mary Carrasco, informó que el tribunal calificó los delitos como homicidio y lesiones graves y leves, imputaciones menores a las denuncias de asesinato y terrorismo que ella y la Fiscalía defendieron para pedir 30 años de prisión contra Fernández.

El tribunal solo hizo conocer la resolución final de la sentencia contra Fernández y otros acusados y el próximo miércoles hará una lectura completa para presentar los argumentos. Carrasco dijo que esperarán a conocer el documento final para pronunciarse sobre la posibilidad de una apelación, reseñó la agencia de noticias EFE.

Tras conocer la sentencia, Fernández declaró: «Es muy fuerte la presión del gobierno hacia el Poder Judicial» porque, en su criterio, su defensa demostró técnicamente que él no tuvo nada que ver como supuesto responsable intelectual de esos sucesos.

Fernández, que en su momento fue un importante líder político de la oposición a Morales, fue candidato a la vicepresidencia en 2009 y a principios de esa década fue presidente del Senado y ministro del Interior en un gobierno conservador.

Además de Fernández, también fueron condenados los ex funcionarios Herman Justiniano, a ocho años de cárcel; Edwin Ventura, a cuatro años y Marcelo Mejido, a cinco, por sus responsabilidades en diferentes grados en los sucesos de 2008. Durante la jornada, varios dirigentes opositores como el ex presidente Jorge Quiroga (2001-2002) y el ex candidato presidencial Samuel Doria Medina, expresaron su apoyo a Fernández y consideraron que es víctima de una supuesta persecución de parte del gobierno de Morales, quien consideró la pena como insuficiente, reprodujo DPA.

«Los juristas dirán si es 15 años o no, pero desde un punto de vista personal, por división de la patria, por genocidio, no corresponde 15 años de cárcel, no entiendo, todos tenemos la obligación de cuidar la unidad del país», afirmó Morales en una rueda de prensa. «Las pruebas sobran, por eso siento que la justicia ha perdonado con 15 años de cárcel», insistió.