Las especulaciones fogonedas desde distintos despachos intentan sembrar algo de incertidumbre sobre el fututo de la reforma previsional. Las operaciones montadas sobre periodistas que desconocen el funcionamiento del Congreso se cruzan con los intereses de los medios que distorsionan los hechos para compatibilizar la noticia con el gusto de sus lectores.

Pero a las 14, la hora señalada para el comienzo de la sesión las especulaciones y las operaciones se toparán con la realidad que mostrará un recinto con quórum, con por lo menos 140 diputados sentados en sus bancas, y el final de la sesión ratificará que el oficialismo cuenta con los votos tanto para aprobar la reforma tributaria como la previsional.

Claro que todo puede cambiar. Sobre todo en relación con lo que suceda afuera del Palacio Legislativos. El escenario no es nuevo para Cambiemos, que controla el Palacio casi a placer desde que asumió pero que nunca controló la calle. Es escenario dinámico que acompaña el Gobierno de Cambiemos desde su comienzo tendrá su foto más elocuente a lo largo de esta tarde. 

Las inmediaciones del Congreso están militarizadas desde temprano. La marcha, que será masiva y que compartirán sindicatos, movimientos sociales y agrupaciones políticas comenzará a las 14. A esa misma hora comenzará a sonar la chicharra que convoca a los diputados al recinto. A partir de ese momento, todo puede suceder. Sin embargo, de no mediar incidentes de gravedad en la marcha ni una violenta represión por parte de las fuerzas de seguridad los acuerdos a los que arribó el Gobierno garantizan la aprobación de las normas.

Con 107 diputados propios, 12 que le aportará el interbloque Argentina Federal, 6 del Frente Cívico Por Santiago del Estero, y el apoyo de algunos bloque provinciales el oficialismo parece tener garantizado el trámite de la sesión.