Decenas de miles de personas volvieron a las calles de Colombia este miércoles para protestar contra el gobierno del presidente Iván Duque, al fin de una semana de manifestaciones que dejaron 24 muertos, la mayoría de ellos por disparos realizados por las fuerzas de seguridad del Estado. El ministerio de Defensa desplegó 47.500 uniformados en todo el país durante las manifestaciones. Solo en Cali hay 700 soldados, 500 hombres de la fuerza antidisturbios (Esmad), 1.800 policías y dos helicópteros adicionales. Desde el fin de semana los militares también patrullan la capital.

Así y todo, estudiantes, sindicatos, indígenas y otros sectores salieron a las calles de la capital Bogotá, Medellín y Cali, entre otras ciudades de todo el país. En distintos puntos de la capital, numerosos grupos se dieron cita para avanzar luego hacia la central Plaza de Bolívar, aledaña a la sede presidencial. Los reclamos son claros: mejores condiciones en salud, educación, seguridad en las regiones, cese del abuso policial contra las manifestaciones, entre otras.

En Cali, miles de indígenas se sumaron a las protestas agitando sus bastones de mando y gritando «resistencia», mientras una multitudinaria manifestación se volcó a las calles en Medellín con música, teatro y arengas contra el gobierno.

Lo que empezó como una manifestación pacífica el 28 de abril en rechazo a una reforma fiscal ya retirada se transformó en la protesta más grande contra el gobierno conservador desde que llegó al poder en 2018. 

...
(Foto: JUAN BARRETO / AFP)

Condena internacional

La presión en las calles no cede, ante la vigilancia de la comunidad internacional que denunció ataques de policías contra civiles. La ONU, La Unión Europea, Estados Unidos, Amnistía Internacional y Human Rights Watch llamaron a la calma y le exigieron garantías al gobierno en medio de las protestas. Según Reporteros sin Fronteras hubo además 76 agresiones contra periodistas, diez de ellos lesionados por la fuerza pública.

Bogotá vivió una noche de tensión el martes. Treinta ciudadanos y 16 policías resultaron heridos tras los choques con uniformados que dejaron 25 puestos policiales afectados, según la alcaldía local. La violencia estalló también en Cali el lunes dejando cinco muertos y una treintena de lesionados.

Duque pide «diálogo»

A las movilizaciones y los disturbios se suman bloqueos en vías. Algunas ciudades como Cali registran desabastecimiento de gasolina y preocupación por el paso de camiones con insumos médicos en plena pandemia del coronavirus.

Duque aseguró que abrirá «espacios de diálogo» para escuchar a los ciudadanos. El gobierno prevé once reuniones con las cortes, el Congreso, organismos de control y la fiscalía, sin incluir todavía a los líderes de las protestas. El llamado Comité del Paro, que reúne a los sectores disconformes, se dijo abierto a una negociación directa sin intermediarios.

Con la popularidad en picada (33%), el presidente ha enfrentado protestas masivas desde 2019, asediado por un descontento avivado por la pandemia. Aunque Duque retiró la iniciativa de reforma tributaria y el ministro de Hacienda renunció, el malestar posconflicto pareció instalarse en uno de los países más desiguales del continente, con un desempleo del 16,8% y una pobreza que alcanza al 42,5% de la población.