El último lunes se llevó a cabo la primera reunión entre representantes de la CGT y del Ministerio de Salud para avanzar en la implementación de la Cobertura Universal de Salud que impulsa una canasta restringida de prestaciones básicas para el uso del sistema de salud pública y la reducción del Plan Médico Obligatorio (PMO).

En síntesis, el nuevo esquema de salud pública que impulsa el Gobierno, con el apoyo de la CGT, restringirá el acceso gratuito a los hospitales ya que una vez agotada las prestaciones en la canasta básica el usuario tendrá que pagarlas. Además, en el marco del debate de la creación de Agencia Nacional de Evaluación de Tecnologías Médicas, se impulsa la reducción del PMO para “bajar los costos de la obras sociales”

La confirmación de las intenciones del Gobierno y de la CGT llegó a Tiempo de boca de dirigente sindical que explicó: “Lo que pasa es que los salarios subieron menos de la mitad de los que subieron los insumos médicos. Si seguimos así las Obras Sociales se mueren”.

Hasta hoy el esquema que plantea la Cobertura Universal de la Salud (CUS) apunta a otorgarle credenciales a 15 millones de personas que se encuentran sin trabajo o trabajan en la informalidad. A partir de allí buscan construir una base de datos federal y digitalizar las historias clínicas.  Con esa credencial los usuarios no solo tendrán acceso a los hospitales públicos sino también a los servicios de las Obras Sociales Sindicales.  Hasta acá, más allá de las digitalización, no hay demasiadas novedades porque la cooperación entre Obras Sociales y hospitales ya existe y el acceso a la salud ya es universal.

Lo que será una novedad según detallaron fuentes gremiales a Tiempo es que habrá una reducción de las prestaciones del Plan Médico Obligatorio (PMO. Esto quiere decir que las obras sociales ya no tendrán que brindar el servicio ni pagar en el caso de que un afiliado se atienda en un hospital. Dentro de esa misma lógica, también se impulsa la creación de una canasta básica de prestaciones médicas. Esto será lo que el Estado garantizará. Nada de lo que quede por fuera será cubierto ni por las Obras Sociales y ni por el Estado.

 Además, la reducción del PMO también beneficiará a la medicina prepaga, que sigue el proceso de cerca para universalizar, en su caso, los copagos.

Desde los gremios que aglutinan a los trabajadores de la salud advierten que con esta nueva norma también cesará definitivamente el Plan Remediar que brindaba medicamentos sin costo a quienes se atendieran en los hospitales públicos. A partir de ahora, señalan los dirigentes, los medicamentos dejarán de ser gratuitos y pasarán a tener un descuento.

«El tema de los medicamentos es algo similar a lo que sucedió en el PAMI. Aquellos remedios que ante podías conseguir gratis, ahora los vas a tener con un descuento del 40% o del 50%”, afirman.

Para el ex ministro de Salud, Daniel Gollan, lo que se va a producir “es una transferencia del costo de las Obras Sociales a los trabajadores. Todos lo que no cubra la Obra Social lo va a terminar pagando el trabajador de su bolsillo”.

En ese sentido, Gollán alerta sobre la inequidad del proyecto impulsado por el Gobierno. “Es un sistema de aseguramiento con una canasta básica de prestaciones muy precaria. Una vez que se pase eso, habrá que pagar. Por lo tanto tendrá más acceso a la salud el que más plata pueda gastas”.

El ex funcionario define a las Cobertura Universal de la Salud como “un sistema basada en la asistencia por lo que traerá una reducción muy fuerte en la promoción y prevención”.