No hay una epidemia. Luego de una semana de zozobra en la que se congestionaron las guardias de los hospitales, particularmente los infantiles, y de seis muertes confirmadas –cinco niños y un adulto–, y once días después de la desaparición del Ministerio dispuesta por el gobierno nacional, la Secretaría de Salud difundió una guía de consulta sobre las infecciones que puede provocar la bacteria Streptococcus pyogenes, con recomendaciones para detectar los síntomas y medidas básicas de prevención.

La cartera sanitaria de la Ciudad –donde se produjeron dos de los decesos, en el Hospital de Niños «Pedro de Elizalde»– decidió enfrentar el alerta reforzando con más médicos las guardias pediátricas, y distribuyendo en hospitales y centros de salud kits reactivos de diagnóstico rápido que permiten determinar en sólo media hora la presencia de la bacteria con un 95% de confiabilidad.

Según todos los especialistas, el aumento de las infecciones causadas por estreptococos se encuentra dentro de los parámetros normales para el último tramo del invierno, por lo que no se trata de un brote, ni existen nexos entre los casos fatales detectados, que esta vez no sólo habrían tenido mayor visibilidad que otros años, tampoco fueron detectados con la precocidad necesaria para evitar las muertes.

La incógnita de si alguna mutación volvió a esta bacteria común más virulenta, la resolverá el Instituto Malbrán, especializado en el estudio de enfermedades infectocontagiosas, cuyos trabajadores ya advirtieron que, por la escasez de insumos debida al ajuste presupuestario y al aumento del dólar, se está analizando la cepa y secuenciando su genoma en una situación de virtual parálisis de funcionamiento. Los resultados estarían el lunes.

Si bien se trata de una bacteria que según la OMS afecta cada año entre el 8% y el 15% de los niños en edad escolar a nivel global, produciendo cuadros de faringitis que se tratan eficazmente con antibióticos, su forma más agresiva genera una infección invasiva que puede resultar letal.

De acuerdo a las recomendaciones de la Dirección Nacional de Epidemiología, es imprescindible consulta rápidamente al médico ante síntomas como fiebre alta acompañada de otros como dolor de garganta, ganglios inflamados o infecciones en la piel. Las enfermedades más frecuentes que causa el Streptococcus pyogenes son la angina y las infecciones de piel, mayoritariamente en niños de entre 4 y 10 años, pero puede causar infecciones más graves cuando bacterias con una mayor capacidad invasora liberan toxinas y desencadenan el llamado síndrome de shock tóxico estreptocóccico, cuadros que se complican en pacientes con factores de riesgo que favorezcan la invasión. «