A un día de asumir su banca de senadora, la ex presidenta Cristina Fernández, calentó el debate sobre la reforma laboral que impulsa el gobierno nacional cuyo debate se dará en la Cámara Alta durante diciembre. “Estamos volviendo al pasado con debates que atrasan e ideas que fracasaron acá y en el mundo”, sostuvo.

La senadora electa no compartirá bancada con el jefe de los senadores del PJ, Miguel Ángel Pichetto, tal como lo anunció el propio legislador rionegrino, por lo que sus posiciones no reflejan la del resto de los senadores peronistas. También asumirán mañana el riojano Carlos Menem y el puntano Adolfo Rodríguez Saá, quienes renuevan sus bancas por seis años más. La ceremonia de asunción se llevará a cabo mañana miércoles, previo a la marcha federal de las dos CTA y sectores de la CGT, en contra de la reforma laboral.

“En 1991 se sancionó la ‘Ley de Empleo’ impulsada por el Ministro de Trabajo Jorge Triaca, padre del actual. Igual que ahora, se reducían derechos con el argumento de que eso iba a permitir crear trabajo. En menos de dos años se duplicó el desempleo, que pasó del 6,6% al 10%”, sostuvo la ex mandataria. “El aumento del desempleo, la precarización y el trabajo en negro no se detuvieron. Tampoco se detuvieron las “reformas”, siempre bajo la promesa de un futuro mejor que estaba cada vez más lejos”, abundó.

“Vino la “reforma” del 98, impulsada por Erman González en el final del menemismo. Allí, 5 diputadxs peronistas nos plantamos y negamos el quórum durante un mes al cabo del cual, en una sesión vergonzosa, lograron la aprobación. En el 2000, durante el gobierno de la Alianza, sancionaron la Ley Banelco a fuerza de sobornos. Nuevamente, un grupo de diputadxs peronistas -más amplio que en el 98- nos opusimos. Igualmente la aprobaron”, historizó.