Lo que el peronismo no logró en la Provincia de Buenos Aires, se cristalizó en la Ciudad. El Kirchnerismo y el PJ irán juntos a las PASO dentro de un frente electoral que incluye a Ahora Buenos Aires, una plataforma ciudadana lanzada hace casi un año por varias organizaciones políticas, sociales y culturales. De esta manera, Unidad Porteña, tal el nombre del frente, buscará constituirse en el principal espacio opositor a Cambiemos en el distrito que lo vio nacer.

“La Ciudad de Buenos Aires es el corazón de Cambiemos y tiene un peso simbólico muy fuerte para el gobierno”, explica Jonathan Thea, referente de Seamos Libres en Ahora Buenos Aires. “Por eso, quienes hacemos política en esta ciudad, tenemos la responsabilidad de construir un espacio amplio, que pueda enfrentar con fuerza al gobierno en estas elecciones pero que también avance en la construcción de una alternativa de gobierno atractiva para el 2019. Por eso, también, la creación de Unidad Porteña nos entusiasma y nos motiva”, ratifica en diálogo con Tiempo.

-¿Cómo se integra Ahora Buenos Aires a este nuevo frente?

-Ahora Buenos Aires está conformado por partidos, espacios, colectivos y referentes sectoriales que creemos que es fundamental crear una nueva experiencia política para gobernar la Ciudad. Estamos convencidos de la necesidad de un espacio con nuevas formas de interpelación y participación ciudadana que sea la antítesis de un espacio electoral para hacer carrera política o buscar beneficios personales. En ese sentido, creemos que es imprescindible construir un espacio distinto que plantee con claridad no pueden seguir sin resolverse los problemas de vivienda, salud y educación en el distrito más rico del país.

-Es una agenda amplia en la que podrían entrar muchas organizaciones que hacen política en la Ciudad…

-Hay muchos referentes y espacios que comparten las características y la identidad del espacio con los que venimos hablando y con los que vamos a profundizar las charlas a partir de la conformación de Unidad Porteña. No se trata de sumar por sumar, por eso no serán parte sectores que buscan visibilidad individual o renovar sus bancas, ni tampoco aquellos que queden afuera de la listas de sus propios espacios políticos. No vamos a andar con la ambulancia juntando heridos. El espacio está abierto a aquellos y aquellas que compartan los postulados y nuestra forma de hacer política.

-Lousteau y Carrió, con el aval PRO, son dos candidatos con mucha visibilidad en los medios masivos y con un aparato comunicacional que viene probando su efectividad en la Ciudad. ¿Cómo se les puede hacer frente?

-Hoy hay nuevas herramientas de comunicación que permiten mayores niveles de llegada. Las redes sociales, medios digitales y plataformas virtuales nos permiten llegar a un sector, fundamentalmente joven, muy importante de la sociedad. Además, somos espacios con mucha militancia territorial, sindical y estudiantil. El mano a mano sigue siendo muy importante.

¿Qué significa para Ahora Bs As la posibilidad de aspirar a espacios en las listas con chances de ocupar alguna banca?

Poder ganar espacios institucionales es muy importante para mostrar que se puede construir una interacción fructífera entre el ámbito legislativo y las organizaciones. Desde el Congreso Nacional y desde la Legislatura vamos a fortalecer las iniciativas y propuestas del espacio.

-Hay una tendencia global que muestra a los partidos tradicionales en una fuerte crisis de representación y perdiendo votos con otras formaciones más nuevas. ¿Cómo evalúan esta situación desde su espacio?

-Creo que tenemos el desafío de construir formatos políticos del siglo XXI; formatos que, sin abandonar principios, ideas y convicciones puedan construir planteos sobre los problemas de la actualidad. Y que, además de construir esos planteos, podamos darle vida a nuevos dispositivos de organización participativa y democrática. Si no asumimos esa tarea, la crisis de representación de los partidos tradiciones va a ser capitalizada por referencias conservadoras y xenófobas. En Argentina hay cierta estabilidad, pero el descontento con la política está presente, y combinada con una situación económica adversa, no sé dónde puede terminar.