En respuesta a la elección de Donald Trump para la presidencia de Estados Unidos, el secretario general de Amnistía Internacional, Salil Shetty señaló: «El presidente electo provocó, en muchos niveles, una gran preocupación a lo largo de su campaña electoral. Planteó grandes inquietudes sobre la fortaleza del compromiso de los Estados Unidos con respecto a los Derechos Humanos en el futuro”.

El secretario general de Amnistía Internacional agregó que el presidente electo “debe dejar todo esto atrás y reafirmar las obligaciones que Estados Unidos contrajo en materia de derechos humanos, nacional e internacionalmente».

El comunicado

En la víspera de las elecciones de esta semana, Estados Unidos fue testigo de una retórica inquietante tanto por parte del presidente electo como por otros. Esta retórica no puede ni debe convertirse en política de gobierno. Las observaciones xenófobas, sexistas y de odio que expuso Trump nos llaman a estar atentos respecto a lo que serán las políticas de derechos humanos en Estados Unidos.

Trump, como presidente electo, debe comprometerse públicamente a defender los Derechos Humanos sin discriminación alguna. Desde los campos de detención de inmigrantes hasta el uso de la tortura, hemos visto resultados desastrosos cuando aquellos que son elegidos para gobernar se burlan de las obligaciones que tienen los Estados Unidos de defender los Derechos Humanos. Todos los que han sido elegidos hoy, desde los cargos ejecutivos hasta el consejo de la ciudad, deben tener en cuenta estas lecciones.