Los docentes bonaerenses marcharon hoy por las calles de La Plata para rechazar la suba del 15% en tres cuotas ofrecida por el gobierno bonaerense y a modo de cierre del segundo paro que llevaron adelante hoy en escuelas de la provincia. «No vamos a aceptar miseria», advirtieron los gremialistas que pidieron que la gobernadora María Eugenia Vidal los reciba en persona. 

La movilización arrancó a media mañana en la plaza Italia y culminó pasado el mediodía con un acto en la Plaza San Martín, de espaldas a la Gobernación. Alli, los secretarios generales de SUTEBA, FEB, SADOP, UDOCBA, AMET y UDA, junto a los estatales de ATE, los médicos de CICOP y los judiciales de AJB manifestaron su rechazo a la suba salarial y los adicionales por presentismo, capacitación y material didáctico propuestos por el gobierno en las últimas reuniones paritarias. 

El titular de SUTEBA, Roberto Baradel, abrió el acto con duras críticas a la mandataria por sus declaraciones de anoche cuando aseguró, en conferencia de prensa, que la suba real es del 18,3% y no del 15% como sostienen los gremios. “Miente la Gobernadora cuando dice que el aumento es del 18 por ciento. Ese porcentaje no le llega a los jubilados. No queremos, no vamos a firmar plata en negro”, sentenció el dirigente. 

También sostuvo que el gobierno «miente» cuando dice que invierten en educación. «Hay escuelas destruidas y todavía no les han puesto un peso», consideró Baradel y agregó: «Por más que mientan, hagan lo que hagan no les vamos a firmar nunca una pauta salarial a la baja». 

«Tiene que salir a hablar la Gobernadora porque los ministros ya no son creíbles. Pero si sigue mintiendo también ella va a perder la credibilidad del pueblo», cerró. 

A su turno, la presidenta de la FEB, Mirta Petrocini, cuestionó duramente la oferta oficial y dijo sin vueltas que es una miseria. «No vamos a aceptar miseria. A ver si se entiende, no vamos a aceptar el 15 por ciento», señaló y generó una ovación de los docentes que la escuchaban en la plaza. «El salario es de miseria. La propuesta es de miseria. Y plata en negro no aceptamos», agregó. 

También explicó por qué rechazan el plus por presentismo de hasta 6 mil pesos anuales, la gratificación por capacitación extra escolar y el plus por material didáctico de 2520 pesos agregado ayer. “No vamos a negociar la salud, no vamos a negociar la capacitación ni el material didáctico porque no conforman el salario y no llegan a los jubilados», siguió Petrocini. 

En la misma línea, el titular de UDOCBA, Miguel Díaz, repudió la oferta y el plus por presentismo y capacitación.»¿Ustedes por 500 pesos mensuales renuncian al derecho a la licencia por enfermedad?», preguntó y recordó que el presentismo «fue implantado en 1993 y lo tuvieron que incorporar al salario porque la gente se enfermaba igual». 

El dirigente también explicó por qué rechazan el bono por capacitación extra escolar: «Una capacitación de 148 horas, similar a una formación técnica nos cuesta 15 mil pesos y el gobierno te da 3000 por ciento por ese ítem».

Tanto el paro de actividades como la movilización y el acto fue llevado adelante en conjunto con los gremios nucleados en la CTA autónoma que también se oponen a una suba del 15%. Vidal anunció ayer el cierre de la paritaria estatal en ese porcentaje para los trabajadores de la administración central aunque con UPCN y FEGEPPBA, el sector «dialoguista».

Como ocurrió en el inicio de clases, el acatamiento al paro docente tuvo cifras muy disímiles: para el Frente de Unidad Docente, la adhesión estuvo entre el 90 y el 95%, mientras que para el gobierno no superó el 40%. 

Un rato después de la movida gremial llegó la respuesta de Vidal desde el programa El diario de Mariana, en canal 13, donde sostuvo que hay «un empecinamiento de los gremios» e insistió en que le mienten a los afiliados cuando le dicen que la suba es del 15%. »Creo que hay un empecinamiento de los dirigentes gremiales de decirles a los docentes que nuestra oferta es del 15% de aumento, y eso no es verdad», dijo.

No obstante, ratificó que volverán a convocar a los gremios y si bien dijo que no se va a «cansar de dialogar», reclamó que «haya un punto de encuentro, que no se politice la discusión y que se ponga la verdad sobre la mesa, que no se mienta».