Fueron 12 millones de personas las que tramitaron el pedido del Ingreso Familiar de Emergencia (IFE) cuya creación anunció el gobierno recién comenzado el aislamiento social preventivo y obligatorio.
Las estimaciones oficiales indicaban entonces que las partidas alcanzarían a 3,6 millones de beneficiarios que, finalmente, rondaron los 9 millones poniendo blanco sobre negro sobre los niveles de pobreza y precarización laboral que existen en el país.
En diálogo con Radio 10, y según reprodujo el portal Infogremiales, Santiago Cafiero, adelantó que desde el ejecutivo planifican publicar esta semana el decreto que renueve el beneficio para el mismo universo de personas.
Al mismo tiempo aclaró que, desde el ejecutivo, todavía están evaluando el monto del beneficio correspondiente al mes de mayo.
Con todo, explicó que «probablemente sea el mismo» que el de abril que, como es sabido, alcanzó los $10 mil para todos aquellos que no percibieran algún beneficio proveniente de la cartera de desarrollo social, jubilados o algún ingreso comprobable en el grupo familiar. 
La asistencia representa el 60% del salario mínimo vital y móvil y menos de un tercio del límite de $33 mil que el gobierno dispuso como techo del subsidio ATP destinado a los salarios de los trabajadores de empresas privadas que lo hubieran solicitado. 
La posible prórroga, además, se conoce cuando todavía no se ha sustanciado el cobro de todos los beneficiarios de la primera tanda que se completará parcialmente esta semana cuando perciban el beneficio aquellos que hubieran definido su medio de pago entre el 16 y 20 de abril pasados.
Resta todavía la partida de beneficiarios que optaron por su medio de pago entre el 27 de abril y el 1 de mayo.