Según los analistas, consultores y académicos de consulta del Banco Central (BCRA), la inflación aumentará en los próximos meses, con lo que el índice de precios se alejará cada vez más de la meta fijada por la entidad monetaria que dirige Federico Sturzenegger.

El BCRA dio a conocer este miércoles el Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) realizado entre el 26 y el 28 de marzo pasado. Allí 53 analistas, consultores y académicos indicaron que la inflación minorista de este año llegará al 20,3%. Cabe consignar que un mes atrás, el mismo grupo opinaba que la carestía sería del 19,9 por ciento.

El dato es consistente con la percepción de que la suba de los precios se acelera ya que con los pronósticos elaborados a fin de marzo suman 11 meses consecutivos de variaciones alcistas en el REM.

En lo inmediato, los consultados consideraron que la suba de precios de abril estará en el orden del 2,1%, una suba desde el 1,9% estimado un mes atrás. Ya suman tres los meses consecutivos que el REM anuncia una suba en los precios de abril.
La estimación al alza llega hasta mayo, mes para el que el REM calcula una inflación del 1,5% versus un 1,4% estimada en febrero pasado.

A pesar de estos indicadores, Sturzenegger aseguró que no modificará la posición de la única herramienta que posee para atacar la inflación: la tasa de interés. «A pesar de los registros de inflación poco alentadores, en el primer trimestre del año, el Banco Central considera que el nivel actual de tasas en 27,25% es el adecuado», dijo en la mañana del miércoles 4, horas antes de que se conociera el REM, en la Expo EFI, un congreso de economía.

Según refirió, el desafío para el BCRA está únicamente en el primer cuatrimestre de este año, tras el cual la suba de las tarifas estará «mucho más alineada con el resto del nivel general de precios», precisó Sturzenegger.

No obstante, y «a la espera» de esas señales de desinflación, el BCRA mantendrá su tasa de referencia tal cual está. Ese nivel contrasta fuertemente con los incrementos paritarios de salarios pactados por una gran cantidad de sindicatos, en torno del 15% más una cláusula de revisión. Junto con la baja de las tarifas, el ancla salarial es el eje de la política de desinflación del BCRA. «Las negociaciones salariales están pactándose en línea con la meta del 15%», se entusiasmó el presidente del BCRA.