El aumento de la conflictividad social también abre las puertas a millonarios negocios para las empresas amigas del gobierno. En este caso, las beneficiadas fueron las encargadas de la limpieza de las zonas de protesta. 

Tanto en la marcha por Santiago Maldonado como en la reciente movilización por los recortes a jubilados llamó la atención la presurosa reacción del Ejecutivo porteño anunciando los millones que iba a costar la puesta en valor de los sitios destrozados: lo que no mencionó fue que la mayor beneficiada por esos trabajos fue sponsor de la Fundación Suma de la vicepresidenta Gabriela Michetti y compartió el paquete accionario de Autopistas del Sol con una firma del Grupo Macri. En los últimos seis años esa empresa obtuvo casi 1200 millones de pesos por obras y servicios de mantenimiento de espacios verdes y arbolado urbano en distintas zonas capitalinas. 

Conflictos y negocios

Zona Verde es una Unión Transitoria de Empresas (UTE) conformada por Urbaser Argentina y Seob SA. En los últimos seis años consiguieron licitaciones del Gobierno de la Ciudad para realizar mantenimiento de áreas verdes, arbolado público y mantenimiento comunal por casi 1200 millones de pesos. Entre las zonas de las que son responsables se encuentran la Plaza de Mayo y el Congreso. Según pudo saber Tiempo a través de un pedido de acceso a la información, el Ejecutivo porteño le encomendó  a esa empresa las obras de limpieza tras la marcha en reclamo por la aparición de Santiago Maldonado por 2,5 millones de pesos.

Más allá del volumen de las operaciones, lo que sorprende son las vinculaciones de Zona Verde con los actuales responsables del gobierno. La UTE fue mencionada entre las 30 contratistas de la Ciudad que sponsorearon a la Fundación Suma de la vicepresidenta Gabriela Michetti, un dato que salió a la luz tras el extraño robo sufrido por la dirigente de Cambiemos revelado por Tiempo en julio de 2016 y que no había sido denunciado por ella. En ese incidente se le sustrajo dinero que no había declarado y que fue atribuido a una presunta donación para su ONG. Pero los contactos llegan hasta el presidente Mauricio Macri: Urbaser Argentina era hasta fines de 2016 propiedad de ACS, la constructora española de Florentino Pérez (presidente del Real Madrid) que es accionista de Autopistas del Sol, y por tanto fue socia de SIDECO Americana, la compañía de la familia Macri que recién vendió su participación accionaria en mayo de 2017. Tanto ACS como SIDECO fueron denunciadas como integrantes de Autopistas del Sol por haber participado de una maniobra millonaria de evasión a través del banco JP Morgan entre 2006 y 2008.

Capítulo Michetti

Otras empresas que sponsorearon a la Fundación Suma tuvieron jugosos contratos con la Ciudad en estos años. Una de las principales es Riva SA, que construyó los metrobuses de Juan B. Justo, 9 de Julio y el Bajo; y Marcalba SA, que en cinco años obtuvo por mantenimiento de calles y veredas unos $ 400 millones. Ambas también fueron aportantes a la campaña de Cambiemos en 2015. 

Dycasa, también del directorio de Autopistas del Sol, fue beneficiada con $ 163 millones para viviendas en la Villa Olímpica de la Ciudad, y en una UTE con Techint ganó la construcción de las estaciones de subte de la línea H. La Auditoría porteña denunció este contrato por considerar que generó «enormes costos extra para las arcas públicas» ya que por equivocar el lugar donde debían construir la estación «Plaza Francia» gastaron 5 millones de más.

Una telaraña millonaria

Ante un pedido de información pública realizado por este diario, Ariel Iasge, director general de Espacios Verdes del Ministerio de Ambiente y Espacio Publico porteño, respondió que las tareas para «arreglar» la zona de Plaza de Mayo post marcha a un mes de la desaparición de Santiago Maldonado consistieron en la «parquización, nivelación del terreno, reposición y reparación de mobiliario urbano; cuadrillas de limpieza con equipos especializados y vehículos de traslado para la limpieza de paredes y fachadas de los inmuebles que fueron vandalizados». Todas estas tareas demandaron $ 2.547.348 y «fueron ejecutadas por la empresa Zona Verde, adjudicataria de la Zona G de la Licitación Pública Nº1463/14 por el ‘Servicio de Mantenimiento Integral de las Áreas Verdes dependientes del Ministerio de Ambiente y Espacio Público'». En rigor, la licitación mencionada por el funcionario fue adjudicada a Urbaser Argentina-Seob SA, que en la  mayoría de los casos se presentan como UTE con sus propios nombres. 

Con la lógica de la cartelización, siete empresas se dividen 15 zonas de la Ciudad para el «Servicio de Mantenimiento Integral de las Áreas Verdes». La de Plaza de Mayo es la «G», por la que originalmente Urbaser y Seob recibieron en 2014 unos $ 47.412.244. Pero no fue la única área que obtuvieron. También se quedaron con la Zona F por 30,8 millones; la zona K por $ 41,7 millones; y la Zona N por $ 37,4 millones. En total, sólo en esa licitación ganó 157,3 millones de pesos. En ese mismo llamado SES SA, una empresa que entonces tenía Nicolás Caputo y que vendió a mitad de 2016, obtuvo dos zonas por 150 millones junto con Mantelectric, también aportante en la campaña del PRO.

Para comprender cómo funciona el sistema de las empresas que se encargan del espacio público porteño, lo mejor es imaginarse una red donde todos los puntos son entrelazados por las mismas firmas (a las antes mencionadas se suman otras como Salvatori, Ecología Urbana SRL y Casa Macchi), en un entramado de licitaciones millonarias en el que se superponen las acciones a realizar. En una de ellas, en febrero de 2012 Zona Verde obtuvo 241 millones por manejar las zonas 1 y 5 del «Servicio de Mantenimiento Sostenible de los Espacios Verdes». En diciembre de 2017 a esa licitación se le agregaron 22,5 millones por «redeterminación de precios». Bajo el concepto de «Servicio de Mantenimiento Comunal y Sostenible de los Espacios Verdes de la Ciudad» Urbaser obtuvo en 2014 otras tres comunas por un valor total de $ 240,6 millones. Y no es todo: en 2015 el gobierno porteño llamó a licitación el «Servicio de Mantenimiento Integral de Arbolado Público Urbano y demás Servicios Conexos en las Comunas de la Ciudad». Nuevamente Urbaser-Seob ganaron tres comunas por  $ 321,8 millones. Seob sola ganó $ 54.125.917 para la «Demarcación Horizontal con material termoplástico en calles, avenidas y cordones de aceras de la Ciudad», en la zona 4. En 2016 Seob también ganó por $ 54.125.917 la «Demarcación Horizontal con material termoplástico en calles, avenidas y cordones de aceras de la Ciudad» en la zona 4. El 20 de diciembre pasado le agregaron $ 19.053.591 por «adecuación de precios».

El 21 de junio 2017 Urbaser se quedó con el «Camino de Sirga III», que consiste en los trabajos de recuperación de la orilla del Riachuelo por $ 94.995.724. Un mes antes había ganado la renovación de Plaza Congreso por $ 58 millones. La inauguraron en septiembre y al día siguiente de la marcha por los ajustes jubilatorios, el Ministerio de Ambiente y Espacio Público de la Ciudad informó que las reparaciones demandarían otros 23.381.639 pesos.  «