Un informe realizado por el Centro de Estudios del Trabajo y el Desarrollo (CETyD) de la Universidad de San Martín basado en dato oficiales del ministerio de Trabajo y Seguridad Social destaca que, a pesar de la leve reactivación económica registrada por el INDEC durante el último cuatrimestre de 2016 que se manifiesta en un incremento del PBI del 0,5% así como a partir del Indice General de Actividad (IGA) de la consultora Orlando Ferreres que muestra un incremento mensual de la actividad desde octubre de 2016 hasta marzo de 2017, la escasa creación de empleo se dio en los tramos más precarizados.

El informe destaca que “la situación del mercado de trabajo (…) ha empeorado marcadamente”. Según datos del ministerio de Trabajo que incluyen a los asalariados privados así como el resto de las categorías ocupacionales registradas en el sistema de seguridad social, entre diciembre de 2015 y febrero de 2017, se incorporaron 142 mil trabajadores al mercado formal de trabajo que representan un 1,2% en el total de empleos registrados. 

Sin embargo, el informe destaca que esos empleos no se explican por el trabajo asalariado registrado en empresas privadas, como debería ser en caso de un crecimiento virtuoso de la economía, sino fundamentalmente por el ingreso de trabajadores al régimen de monotributo y, en menor medida, al monotributo social y el empleo público. 

El empleo privado registrado bajo convenio sólo explica un 4% de esos 142 mil empleos mientras que el 58% son monotributistas, el 18%  empleados públicos y un 17% monotributistas sociales. Un 10% del total son trabajadores de casas particulares. 

El informe alerta que, desde abril de 2016, los trabajadores registrados bajo el régimen de monotributo pasaron a beneficiarse con la extensión del régimen de asignaciones familiares lo que podría haber incentivado a una inscripción masiva en ese rubro toda vez que los costos de las categorías inferiores (de la A a la D) se ubican por debajo del valor de la asignación pautada por cada hijo.

Además, el CETyD alerta sobre la posibilidad de que la ampliación del régimen de monotributistas se explique por la “predisposición de un segmento de las empresas a utilizar este régimen como forma de encubrir una relación laboral de dependencia.”

En el período que va desde mayo de 2016 y febrero de 2017, el empleo en empresas privadas que se ha creado representa un crecimiento de apenas un 0,5% equivalente a 5 mil trabajadores en relación de dependencia. En paralelo, se perdieron 63.118 empleos en el sector privado registrado.

Además de la pérdida absoluta de empleo, el informe destaca que, por otra parte, según datos del Sistema Integrado Provisional Argentino (SIPA), el salario real incluido en todas las categorías a febrero de 2017 se encuentra un 7,2% por debajo de noviembre de 2015.