Ema Moyano es de Talar de Pacheco, Tigre. Tiene 45 años, es empleada doméstica, peluquera y hace todo tipo de rebusques para llegar a fin de mes. Es madre soltera y cría sola a Tobías Pazos, su único hijo de 17. Ella podría ser una mujer más del conurbano, pero desde hace una semana atraviesa la peor de sus pesadillas y necesita ayuda: Tobi se accidentó en moto y permanece en coma, entubado en una clínica privada que les cobra más de 50 mil pesos por día por mantenerlo con vida.

El barrio La Paloma, donde viven Ema y Tobi, respondió de la mejor manera, con solidaridad y afecto desinteresado. Diferentes vecinos ofrecen sus servicios y lo recaudado es destinado a la familia de Tobi para que pueda solventar el costo del sanatorio privado donde el chico se encuentra internado.

Desde ese día, allegados, familiares y amigos hacen lo imposible por dar una mano: desde rifas, torneos de fútbol, cortes de pelo solidarios, alquilan quintas para pasar el día, pizzerías y kioscos, clases de zumba y bingos, son algunos de los emprendimientos que se pusieron a disposición de Ema.

Tobi se accidentó el martes 28 de enero, a las 17.30, cuando conducía una moto, que iba con un acompañante, que le habían prestado en la localidad de Talar de Pacheco, a unas ocho cuadras de su casa. En ese momento, en las inmediaciones de las calles Groussac y Sarmiento, un hombre intentó entrar al garaje con su auto y chocó a la moto.

“Fue un instante. Parece que el auto no puso la luz de giro y mi hijo no llegó a frenar. Afortunadamente, el chico que iba de acompañante está bien pero mi hijo quedó desvanecido, inconsciente”, explicó Ema, quien recordó: “Me vinieron a avisar lo que había pasado y me bloqué. Llegué como pude al lugar del accidente y en el camino me crucé con la ambulancia. Se lo llevaba al hospital de Pacheco en ese mismo momento”.

“Hablé con la oficial que también estaba ahí y me dijo que tenía cortes en el rostro. Todo el tiempo me quería calmar. Yo estaba con un ataque de nervios, recién llegaba de trabajar”, sostuvo la mujer.

Minutos después, Tobi ingresaba en la guardia del hospital donde le realizaron los primeros auxilios, pero no podía quedarse porque no contaban con neurocirujano y la víctima debía ser intervenido con urgencia. Los familiares intentaron comunicarse con el Hospital de San Fernando y San Isidro, pero tampoco tuvieron suerte.

“Había que tomar una decisión rápida y salimos a buscar una clínica. Finalmente, el municipio de Tigre hizo el traslado al Sanatorio Las Lomas, de San Isidro, y a los 20 minutos lo operaron. Después del accidente, él entró en coma por el impacto en la cabeza y así permanece hasta ahora”, continuó la madre de Tobi.

“Sigue en coma, en terapia intensiva y con respiración asistida. Está estable y está con vida, es mi único hijo. El problema que tengo es económico. Necesito de la colaboración de todos los argentinos para que pueda seguir internado”, precisó la mujer.

En concreto, la familia al no tener Obra Social debe abonar una elevada suma de dinero por cada servicio médico que se le practica al chico. La cifra varía, pero el promedio diario de costos es de 50 mil pesos, además de los estudios que no están contemplados. “Cada granito de arena suma. Estoy desesperada lo ideal es que Tobías siga en el sanatorio hasta que pueda salir del estado crítico”, concluyó Ema.

La familia puso a disposición de quienes puedan colaborar el CBU 0170121640000003343290, a nombre de Cristian Villalba, el sobrino de la mujer y primo de Tobi.