«Viernes negro”. Así, denominaron a la crisis provocada por el triunfo del Brexit, en Gran Bretaña. Las bolsas mundiales se desplomaron ante la salida británica de la Unión Europea. La AFA también tuvo su “viernes negro”. El acuerdo por la Superliga estaba encaminado y la FIFA oficializó la intervención. Pero la jueza María Servini de Cubría pateó el tablero: después de procesar a siete directivos de la AFA, desconoció la decisión de la FIFA, lo cual podría traer graves consecuencias para el fútbol argentino. Luis Segura, que dejó de ser presidente y volvió a asumir a las pocas horas, regresó al país antes de la final de Copa América. La situación es tan crítica que hasta Leo Messi se encargó de tirar la bronca.

La FIFA oficializó el viernes por la tarde la creación de la Comisión Normalizadora (CN), que dejó a Luis Segura sin el cargo de presidente. La intención del organismo internacional -tal cual se esperaba- es “administrar la actividad diaria de la AFA, revisar sus estatutos para adaptarlos (…) y organizar elecciones”. La FIFA puso como fecha tope para esos comicios al 30 de junio de 2017, aclaró que  “ninguno de sus miembros podrá optar a los cargos convocados” para esa fecha y contó que la CN estará integrada por “5 o 7” directivos de la AFA designados por la propia FIFA y por la Conmebol. Esta comisión desplazó a Segura de su cargo, el cual sería ocupado de manera interina por el actual secretario ejecutivo Damián Dupiellet.

Sin embargo, unas horas más tarde estalló la bomba menos esperada: Servini de Cubría dio la orden de que se desconociera el mandato divino de la FIFA. Esto podría ser tomado de manera muy negativa por la FIFA, que incluso podría sacar a Argentina (selección y clubes) de torneos internacionales. Alberto Piotti, veedor de la AFA puesto por Servini, explicó en Radio 10: “A nadie le gusta enterarse por TV que se nombra a un presidente interino. Si hubiese sido al revés, en Suiza no se quedarían con los brazos cruzados (…) No sé qué decisión tomará la FIFA. El lunes la jueza fijará fecha para la audiencia a la que están convocados los representantes de FIFA, que la vez anterior cuando vinieron al país ni cerca estuvieron de Tribunales. Si están preocupados, que vengan”, expresó y siguió sin bajar el tono: “FIFA sigue siendo la autoridad, pero ¿qué es más importante, una cuestión deportiva o una investigación por un fraude descomunal?”. Y aclaró: “Quiero sacar la palabra intervención del medio. La doctora nombró veedores pudiendo haber intervenido y no lo hizo para no colisionar”.

Esta historia, sumada a los procesamientos de siete directivos de alto rango (incluido Segura) y los tres últimos jefes de Gabinete del kirchnerismo (Juan Manuel Abal Medina, Jorge Capitanich y Aníbal Fernández) por supuestas irregularidades en el manejo de los dineros de Fútbol para Todos, también hizo retroceder al acuerdo que se había logrado por la Superliga. Los dirigentes respondían (en los tiempos que se investigan) a Julio Grondona y todos declararon (la mayoría, por escrito) en vías similares: delegaron la responsabilidad de sus firmas y de sus actos al Comité Ejecutivo de la AFA, para dejar sentado que no tenían poder de decisión individual. Además, le tiraron la pelota al gobierno anterior, al expresar que las decisiones financieras eran tomadas por el programa FPT.

En ese marco, hasta Lionel Messi salió con los tapones de punta. Leo no es de meterse en cuestiones políticas, pero se expresó por las redes sociales: “Que desastre son los de la AFA por dios!!!”. Además, avisó que después de la final se extenderá sobre el tema. El capítulo está abierto.