Excepto por las escandalosas declaraciones de Darío Lopérfido acerca de los desaparecidos que precipitaron su salida como ministro de Cultura de la Ciudad, la gestión cultural, tanto a nivel nacional como local, se caracterizó por ser más bien silenciosa acaso en sintonía con una política que también en el campo cultural se caracterizó por el recorte. 

Del mismo modo, silenciosamente, Ángel Mahler dejó ayer el ministerio de Cultura de la Ciudad, cargo en el que fue reemplazado por Enrique Avogadro. El anuncio lo hizo el jefe de Gobierno de la Ciudad Horacio Rodríguez Larreta desde Parque Patricios ante unos pocos periodistas. 

En medio de una jornada al rojo vivo por el debate acerca de la reforma laboral y previsional que militarizó las calles y supuso represión y ataques incluso a algunos diputados, la noticia pasó casi inadvertida. Como es habitual en estos casos, Rodríguez Larreta elogió la gestión de Mahler que, según expresó, será profundizada por Avogrado. 

El anuncio traía aparejado otro: la creación de un Consejo Cultural con la idea de “fomentar la participación público-privada y fomentar la movida cultural independiente” que estará a cargo del actual Director del Complejo Teatral Buenos Aires Jorge Telerman. El nombramiento de Mahler no había sido bien recibido en el mundo de la cultura tanto por su falta de antecedentes en la gestión cultural como por la multiplicidad de juicios en su contra por emplear artistas en condiciones precarias con contratos cuyos beneficios estaban sujetos al éxito de los espectáculos presentados. 

El nuevo ministro de Cultura de la Nación Enrique Avogadro fue el número dos de la gestión de Pablo Avelluto, ministro de Cultura de la Nación, y la tensión que había entre ambos culminó con la salida de Avogadro, quien también tuvo intervención en Industrias Culturales durante la gestión de Mauricio Macri como jefe de Gobierno de la Ciudad y mantiene una relación cercana con el jefe de Gabinete Marcos Peña. 

A sólo unos meses de su partida que se produjo en el mes de agosto, Avogadro vuelve a entrar en el área de Cultura por la puerta grande. Según lo consigna Infobae en una entrevista al nuevo ministro de Cultura, el primer sorprendido por la designación fue él mismo ya que se le comunicó pocas horas antes de hacer pública su designación ante la prensa. 

Todo hace pensar que la política privatista del PRO se intensificará en el área de Cultura con la creación del Consejo Cultural. “Es importante reconocer el rol que tiene la cultura independiente –le dijo el flamante ministro a Infobae-. Como falencia, sí, es una deuda pendiente. A mí me alegra, me estimula, me emociona, que esté claramente ese mandato, porque es una escena que alimenta constantemente a la oferta pública. Si vos ves un mapa de la ciudad con la oferta cultural pública vas a tener zonas donde hay menos, pero si le agregás la oferta cultural independiente el mapa es totalmente distinto.”