Estudiantes y docentes ocuparon la sede de la Universidad de las Madres contra del vaciamiento y la intervención en el instituto luego de que el gobierno nacional separara al rector Germán Ibáñez y designara a Javier Buján como interventor.

Alumnos, profesores y directivos del Instituto Universitario Nacional de Derechos Humanos Madres de Plaza de Mayo (IUNMa) tomaron el martes el 5° piso del edificio de la ex Secretaria de DD HH de la calle 25 de mayo 552 frente al atropello contra la educación pública que pretende realizar el gobierno nacional.

Desde hace algunas semanas, el Gobierno nacional hizo correr de a poco el rumor de una posible intervención. Esta amenaza se transformó finalmente en un hecho concreto: el Poder Ejecutivo Nacional intervino formalmente el IUNMa a través del desplazamiento de quien fue su rector y con la designación de nuevas autoridades.

La medida arbitraria se llevó a cabo mediante una resolución conjunta del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos y el Ministerio de Educación y Deportes.

Elina Estrada, vice presidenta del Centro de Estudiantes y estudiante de la carrera de Trabajo Social, dialogó con Tiempo Argentino y manifestó que desde la creación de la institución se les dio por ley el espacio físico que hoy defienden de manera provisoria hasta el pase efectivo al edificio donde se encuentra la ex ESMA.

“Ahora, lo que se promete de palabra es que nos van a dar un alquiler por Once, que es un lugar que alquila el Ministerio de educación y que cuando se desocupe quedará para nosotros. Pero es de un privado y el alquiler es millonario”, contó.

La estudiante hizo énfasis en el vaciamiento que sufrió la institución por parte del gobierno con un recorte en su presupuesto de más del 75% y manifestó que el sobrante del presupuesto no alcanza para pagar los sueldos de los docentes menos para el alquiler, por lo que se destinaría un apartida extraordinaria, según la versión del gobierno.

Los alumnos reclaman un lugar estable para poder realizar su currícula anual y que se los traslade de forma efectiva y definitiva a la ex ESMA.

Dentro de este reclamo popular de parte de alumnos y docentes se suma el descontento por las condiciones edilicias con las que conviven todos los días: baños sin mantenimiento, paredes con humedad, instalación eléctrica precaria y sin supervisión.

El alma de este reclamo popular es defender su lugar de estudio y defender las tares del rector Germán Ibáñez y la designación de docentes. También reclaman la conformación de los claustros para avanzar con la normalización de la universidad y repudian la designación de Buján, ex interventor en el INADI y que denuncian tiene antecedentes de malversación de fondos de dicha entidad.