Ernestina Herrera de Noble, principal accionista y directora de Clarín durante 48 años, murió este miércoles a los 92 años según informó el propio diario.

A cargo del mayor multimedios de Argentina, la empresaria fue investigada en dos ocasiones por sus vínculos con la última dictadura, pero en ambos casos fueron cerradas.

Estuvo presa en 2002 en el marco de la causa en la que se investigaba si sus dos hijos adoptivos habían sido apropiados durante el terrorismo de Estado, expediente en el que finalmente fue sobreseída años después.

La misma suerte tuvo la causa por la apropiación de Papel Prensa, donde fue beneficiada con el sobreseimiento junto a Héctor Magnetto y Bartolomé Mitre, de La Nación.

La mujer estuvo al frente de Clarín desde el 21 de enero de 1969, tras la muerte de su esposo Roberto Noble, el fundador del diario. Heredó la dirección del matutino y encabezó la transformación en multimedios con la compra de radios, canales, cableoperadores y otros servicios de comunicación.

Parte de la historia de Herrera de Noble fue contada por el documental Clarín, un invento argentino

Clarín la recordó en varias notas publicadas este miércoles en su página web. Allí destacó su “fuerte presencia, liderazgo y defensa de la libertad de prensa”.