Los principales líderes europeos respaldaron este jueves con contundencia al presidente del gobierno español, Mariano Rajoy, y abogaron por la unidad de España, al llegar a Bruselas para participar de la cumbre de jefes de Estado y Gobierno de la Unión Europea (UE). 

 La canciller alemana, Angela Merkel, expresó su apoyo al gobierno español frente al intento independentista de Cataluña y remarcó que la solución al conflicto debe buscarse «en la base de la Constitución española».

La canciller hizo estas declaraciones al llegar a la cumbre de la UE, que se celebra este jueves y viernes, y en la que el conflicto catalán se coló en las conversaciones pese a no estar en la agenda, centrada en inmigración, Defensa y Brexit.

Además, el presidente francés, Emmanuel Macron, mostró un fuerte respaldo a Rajoy al asegurar que la cumbre estará marcada por «enviar un mensaje de unidad» de todos los socios. «Este Consejo estará marcado por un mensaje de unidad, de unidad en torno a los Estados miembros de cara a las crisis que puedan conocer. Unidad en torno a España», dijo Macron a su llegada a la reunión, citado por la agencia de noticias española EFE. 

Cataluña celebró, con muchas dificultades, un referéndum secesionista el 1 de octubre, en el que una amplia mayoría de los que pudieron votar se pronunció a favor de la independencia. 

Sin embargo, al momento de declararla, el gobierno autonomista catalán pidió al Congreso que la suspenda para poder entablar un diálogo con el gobierno central español, un diálogo que nunca tuvo lugar y que dejó a la región al borde de la intervención federal.

 Al llegar a la cumbre, el presidente del gobierno español, Mariano Rajoy, evitó responder sobre una posible aplicación del artículo 155 de la Constitución a partir del próximo sábado. Rajoy convocó para ese día una reunión del Consejo de Ministros con el fin de aprobar medidas relacionadas con la aplicación de ese artículo para asumir competencias del gobierno autonómico catalán.

La reunión fue convocada luego de haber recibido una carta del presidente del gobierno catalán, Carles Puigdemont, en la que dice que si «persiste en impedir el diálogo» el Parlamento regional «podrá proceder a votar la declaración formal de independencia» de Cataluña.

Asimismo, el primer ministro holandés, Mark Rutte, respaldó hoy al gobierno español argumentando que actúa «según el más alto tribunal», en referencia al Tribunal Constitucional español, que declaró ilegal el referéndum independentista.

Rajoy está «siguiendo la opinión del más alto tribunal español. El más alto tribunal español ha dicho que el referéndum es ilegal», enfatizó al llegar Rutte, quien además, consideró que se trata de una cuestión española por lo que es «inapropiado comentar» sobre el asunto desde su posición.

En referencia a las peticiones de mediación internacional hechas por el gobierno de la Generalitat catalana, Rutte consideró que se trata de «un asunto entre el gobierno de España y una región española. Sólo podría haber un papel para la Unión Europea si España lo solicita». 

Previamente, sus homólogos del Benelux, el belga Charles Michel y el luxemburgués Xavier Bettel, a su llegada al Consejo Europeo (CE), pidieron «diálogo político» para resolver la situación en Cataluña. 

En tanto, el presidente del Parlamento Europeo (PE), Antonio Tajani, rechazó invitar al presidente del Gobierno catalán a la Eurocámara, y explicó que no pretende «reconocer a Cataluña como un país ni como un socio que está al mismo nivel que España». «Siempre he recibido a cualquiera que quiera reunirse conmigo (…), pero Cataluña no es un país; quiero que eso quede claro: Cataluña es una comunidad autónoma, que es parte de España», aseveró Tajani. 

Ya dentro de la hemiciclo, el primer ministro esloveno, Miro Cerar, declaró que la situación de Cataluña no es comparable con la de su país hace 26 años, cuando se independizó de la ahora ex Yugoslavia.  

«España, incluida Cataluña, es un Estado democrático, y cuando hay una cuestión sobre la autodeterminación debe resolverse en línea con el orden constitucional de España y, lo más importante, se tiene que hacer pacíficamente, sin violencia, democráticamente y con diálogo», dijo el jefe del Gobierno esloveno. 

Cerar señaló que, si bien Cataluña no está en la agenda de la cumbre de líderes de la Unión Europea de hoy y mañana, explicará la posición de su país si se le pregunta, al calor de las analogías que se han hecho entre la independencia eslovena y el desafío separatista de la Generalitat catalana. 

«Valoramos mucho el derecho a la autodeterminación, que es un derecho internacionalmente reconocido, lo que está bien. Pero es verdad que uno tiene que tener cuidado porque hay grandes diferencias entre Eslovenia y Cataluña», explicó el primer ministro esloveno. 

«Cuando Eslovenia decidió ser independiente lo hizo porque el anterior país común, Yugoslavia, empezaba a descomponerse. Y Yugoslavia no era un Estado democrático», declaró.