Si bien la garrafa social de gas pasa a costar $ 267.70 a partir de este viernes según los datos oficiales la realidad en los barrios es muy distinta. Es casi imposible conseguir una garrafa a precio oficial y los comerciantes juegan un papel fundamental en la variación de precios del producto.

Desde que se publicó en los medios acerca del tarifazo a los servicios públicos, que incluía también la suba del gas, muchos negocios comenzaron a aumentar los precios de las garrafas de 10 kilos con el argumento de que necesitaban tener “disponibilidad para reponer su mercadería”.

El último lunes de enero, a través del Boletín Oficial, el gobierno nacional informó que la garrafa social de gas con el aumento anunciado ($ 267,70 a partir del viernes 1 de febrero), supone un incremento del 23,93% para el tubo de 10 kilogramos, que hasta ahora costaba $ 216.

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Un relevamiento por zona sur del Conurbano bonaerense, más precisamente en Lomas de Zamora, en una planta distribuidora y varios comercios de los alrededores indica que cada negocio tiene sus propias reglas. La diferencia de precios varía notablemente: va de 100 a 250 y en algunos casos la garrafa llega a costar 470 pesos si se toma como base el valor que ofrece la planta.

La distribuidora de gas licuado envasado de la localidad de Lomas De Zamora que se encuentra sobre la colectora de Camino Presidente Juan Domingo Perón y calle Pilcomayo (Fiorito) de la firma EXTRAGAS ofrece, la Garrafa Social a un valor de 280 pesos actualmente por unidad de envase.

En el caso de los beneficiarios del plan Hogar pagan el mismo precio en planta, pero luego reciben el reintegro por parte de Estado. El subsidio para los beneficiarios de ese plan, administrado por ANSES es de 151 pesos actualmente, esto lleva a un valor de 129 pesos por garrafa para los beneficiarios.

Tiempo, dialogó con Leandro Bustos, un empleado quien atiende todos los días detrás de una reja la larga fila de vecinos que se agolpa las mañanas de lunes a sábados desde las 7, en busca de su suministro de gas. “Todos los días es igual, llegamos a la planta y ya hay gente esperando. La cantidad de gente que viene en busca de una garrafa es mucha, llegan de todos lados, hay mucha necesidad”, cuenta Bustos.

Por otra parte, un empleado jerárquico de la planta, explicó, “subimos el precio debido al aumento programado para hoy, el incremento se debe a la variación de valores en costos de producción, pero tratamos de mantener un precio accesible por la demanda” cuenta.

Desde que el lugar abre sus puertas a esa hora de la mañana el paisaje y la calzada, es conquistada por camionetas, autos, bicicletas carritos de compras o zorras de embalaje, cualquier medio es valedero para trasportar las garras ida y vuelta.

Raúl un vecino de 60 años contó, «en mi familia somos 12 personas, camino más de 40 cuadras para venir a buscar garrafa porque en la almacén cerca de mi casa te cobran 400 pesos una garrafa” se queja.

Garrafa en la era Macri

En los últimos tres años del gobierno de Mauricio Macri, se triplicó el precio de la garrafa. Aproximadamente, el 40% de la población argentina no tiene acceso a la red de gas natural domiciliaria.

El valor del gas envasado continúa siendo superior al de red y gran parte de los hogares que las consumen se encuentran dentro de los que menos ingresos tienen. El valor de la garrafa en los barrios del Conurbano bonaerense y de la Ciudad se triplicó desde 2015.

El valor regulado ascendió desde $97 en diciembre de 2015 a $296 en enero de 2019, es decir, registró un aumento de 205%. Según datos del Indec, durante ese mismo período el aumento de los precios fue del 164%. Claramente estos valores quedan relegados muy atrás de su precio real de consumo.