Cuatro policías del Comando de Patrullas de 3 de Febrero fueron separados de sus funciones mientras se lleva adelante la investigación por la muerte de un músico baleado durante una persecución policial tras un presunto robo en un supermercado de la localidad bonaerense de Martín Coronado, informaron hoy fuentes de la fuerza.

La decisión fue tomada por el auditor general de Asuntos Internos del Ministerio de Seguridad bonaerense, Guillermo Berra, quien inició un sumario interno para evaluar la conducta de los oficiales subayudantes Gonzalo Martín Juárez y Julián Roberto Juncal, el oficial subinspector Sergio Darío Montenegro y el oficial Rodrigo César Exequiel Canstatt y los separó preventivamente de sus funciones.

En paralelo, la Justicia investiga si tuvieron responsabilidad penal en el episodio que derivó en la muerte del músico Diego Cagliero (30), del que participaron al menos otros seis efectivos.

Los voceros añadieron que ayer familiares del músico, quien iba a ser padre en unos meses, se reunieron con el ministro Cristian Ritondo, a quien le pidieron el esclarecimiento del hecho, que consideran un caso de «gatillo fácil».

La investigación judicial del hecho está a cargo de la fiscal Gabriela Disnan, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 5 de San Martín, quien tiene por acreditado que el 19 de mayo un grupo de ocho jóvenes llegó en una camioneta con el logo de la empresa Aysa al supermercado “Día” ubicado en Perón al 7300, de Martín Coronado, partido de Tres de Febrero.

Seis de esos muchachos agarraron hamburguesas y bebidas alcohólicas y se quisieron ir sin pagar del local, lo que generó en la vereda una discusión con el personal de seguridad del comercio, por lo que descartaron parte de la mercadería pero se llevaron el alcohol, según consta en la causa.

De acuerdo al relato de un vigilador, uno de los jóvenes le dijo “ojo que te pego un tiro”, pero en ningún momento nadie de los imputados exhibió un arma de fuego.

Desde el supermercado dieron aviso al 911 y así se montó un operativo cerrojo y una persecución que culminó cuando varios patrulleros de la comisaría 5ta. de Eufrasio Álvarez y del Comando de Patrullas local interceptaron la camioneta en la esquina de Campo de Mayo y avenida Márquez, a unas 17 cuadras del supermercado.

Los policías declararon que escucharon la detonación de un arma de fuego y así repelieron la supuesta agresión con disparos, uno de los cuales le dio en el pecho a Cagliero, quien quedó muerto dentro de la camioneta.

La fiscal investiga si ese supuesto primer disparo desde la camioneta que alegan los policías existió o no, si pudo haber sido efectuado por un arma de aire comprimido o si fue un tiro de otro policía que estaba del otro lado de donde venía la persecución.

Adriana García, la madre de Cagliero, denunció en varios medios y por redes sociales que su hijo fue “asesinado por la policía bonaerense”.

La fiscal desdobló el expediente en dos, una por el “robo agravado por haber sido cometido en poblado y en banda” y otro por la muerte del músico.

Si bien por el momento no adoptó ningún temperamento respecto de los efectivos, Disnan investiga el proceder de la fuerza en el hecho para determinar cuántos de ellos dispararon y si su accionar estuvo o no justificado.