Los próximos sábados 9 y 16 de junio Amores Tangos presenta su último disco en Buenos Aires (21 horas, La Tangente, Honduras 5317). Luego de que Fronterabierta (tal el tíulo del álbum) saliera al público hace siete meses, la banda lo estuvo mostrando, entre otras, en Córdoba, Mar del Plata y La Plata, y por eso de lo difícil que es organizar la vida en los tiempos que corren quedó Buenos Aires para cerrar el primer semestre de la agrupación, que en el segundo estará festejando sus diez años de vida.

“Lo más especial de esta presentación es que van a estar todos los músicos que participaron, excepto el que hicimos con Marta Gómez, que lo grabamos en España”, cuenta José Teixidó, oficialmente está a cargo de guitarra, arreglos y dirección, y sin tanta presentación, de varios de los temas que componen el disco. Eso de la composición, junto con los temas cantados, también es algo novedoso para la banda. En el primer disco (Orquesta de Carnaval) prácticamente no existían, en el segundo (Altamar) fueron la mitad, y en el tercero ya son siete. “Y hay un solo tema instrumental en éste, cuando en el primero fue exactamente al revés: sólo uno”, señala Teixidó.

La razón para que Fronterabierta sea el “más cancionístico” de los trabajos de Amores Tangos, para Teixidó resulta sencilla: “Es una cuestión de armar tu propia banda para tocar lo que querés. Cuando empezamos hace 10 años lo hicimos con esa idea: tocar lo que teníamos ganas de tocar. Y al principio nos daba más ganas de tango instrumental y ahora nos da más para temas cantadas y componer. Tener un grupo es tener una usina de creatividad: tengo una idea de un tema o un arreglo, y tengo un lugar donde probarla. Y eso es maravilloso. Se te ocurre una canción y a los tres días te juntás con tus amigos y probás”. Y le gusta la comparación que se le ofrece con un grupo de amigos que se juntan para jugar al fútbol: “Exactamente, tenés que jugar, vas para jugar a la pelota, qué vas a hacer. Jugás. Y así probás y ves si te salen o no y cómo hace para que salgan”.

Además de los tiempos que impone la propia vida, también estaba el tema de elegir el lugar más adecuado para lo que se deseaba de esta presentación. Y La Tangente estaba entre los pretendidos: “Nos permite estar muy cerca de la gente, cosa que nos gusta mucho. Verles las caras te permite armar una intimidad, y además suena muy bien. Eso está buenísimo en un lugar para 150 personas”.

Luego de estas presentaciones la banda se pondrá en aprestos para su gira europea, que incluye la participación en el Festival Tarbes en Tango, en Francia, y los festejos por los diez años del grupo, que se cumplen en noviembre. “Nos va bárbaro, fenómeno”, dice y estalla en carcajada. “No, no viene complicada la mano. Para dar una idea, hace dos años empezamos a viajar al exterior, cosa que antes no hacíamos. Porque la realidad es que acá tenemos menos trabajo. Antes teníamos la posibilidad de viajar pero elegíamos tocar en el país. Y si bien viajar es algo que nos gusta, preferimos más hacerlo con el público de acá. Y creo que a muchos grupos de tango les pasa lo mismo”.