Representantes del Movimiento de Empresarios Nacionales para el Desarrollo Argentino, que organiza a industriales de pequeñas y medianas empresas, reclamaron en el Congreso que se declare la emergencia económica en todo el país a partir de la apertura de las importaciones, la suba en las tarifas y la baja del consumo, variables que según afirmaron de manera unánime, «construyen una tormenta perfecta» que perjudica al sector.

Los empresarios concurrieron a la convocatoria de la Comisión de Industria de Diputados y fueron recibidos por su titular, José de Mendiguren, del Frente Renovador, y por Axel Kicillof (FpV), quienes fueron los encargados de recoger los reclamos. La convocatoria reunió a representantes del sector textil-indumentaria, cuero y calzado, informático y metalúrgico; madera y muebles –entre otros– de todo el país. Durante el encuentro, que se extendió por más de cuatro horas, se analizaron de manera conjunta los problemas que está atravesando el sector productivo. La comisión discutió la posibilidad de pedir que se declare la emergencia para el sector y se comprometió a hacer un estudio detallado para arribar a una conclusión en breve.

Leo Bilanski, del Movimiento de Empresarios Nacionales sostuvo que están siendo «agredidos por la política económica». «En el gobierno hay 114 ceócratas que están tomando medidas que dañan nuestro tejido pyme. Sacan la ley para las empresas offshore y no se reglamenta la ley pymes. Y no pudimos sacar las leyes contra el tarifazo. Las corporaciones tienen más relevancia que todos los que estamos acá», señaló. 

«Nos oponemos a un plan de trasformación de la matriz productiva, quien decide cambiar todo esto es Miguel Braun, al frente de la secretaría de Comercio, quien propició la apertura comercial». «Nos piden que se nos reconvirtamos a importar y si no sólo queda cerrar. Es urgente impulsar una ley de emergencia pyme», reclamó Bilanski.

Por su parte, Damián Regalini, empresario textil, presidente de la Cámara Argentina de fabricantes de medias y dirigente de la Fundación Protejer, describió una caída del sector debido a «la baja del poder adquisitivo», y llamó a «superar la catársis y construir la propia voz, porque -argumentó- ésto no va a parar».

Los representantes de la industria del acero señalaron que «recesión con importaciones y costos laborales altos de una paritaria del 25% es la tormenta perfecta». Asimismo, reclamaron medidas antidumping que se impone desde China e India.

Martín Bernocco dirige la fundición que tiene 60 años y fue fundada por su abuelo. «El último año fue el peor para la cámara de fundidores, estamos a punta de desaparecer».

Por su parte, Carolina Carregal de Asociación de Industriales Metalúrgicos de la República Argentina (Adimra), criticó la poca importancia que le dieron desde le gobierno a la ley de Compre Nacional.

También participaron la Federación Argentina de la Industria Maderera y Afines, la Federación de Industrias Textiles Argentinas, la
Asociación Argentina de Químicos y Coloristas Textiles y la Mesa de industriales bonaerenses.