Barcelona,

El ex presidente catalán Artur Mas fue condenado a dos años de inhabilitación por haber desobedecido al Tribunal Constitución español celebrando la consulta simbólica secesionista del 9 de noviembre de 2014, anunció el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC).

Junto con Mas fueron condenadas también la ex presidenta catalana Joana Ortega, quien recibió una pena de un año y nueve meses de inhabilitación, y la ex consejera de Educación catalana Irene Rigau, sentenciada a un año y seis meses de inhabilitación por haber «colaborado» ambas con el delito de desobediencia.

No obstante, los tres dirigentes independentistas fueron absueltos del delito de prevaricato del que habían sido acusados, según la sentencia leída por el presidente del tribunal en Barcelona. Asimismo, la sentencia, que fue unánime, obliga a los condenados a pagar respectivamente multas de 36.500, 30.000 y 24.000 euros (a razón de una cuota diaria de 100 euros).

Durante el juicio, que tuvo lugar hace un mes, Mas dijo que no tenía «ánimo de cometer ningún delito ni desobedecer a nadie», pero admitió ser el máximo responsable de la iniciativa.

El gobierno español de Mariano Rajoy intentó impedir la consulta recurriendo al Constitucional por considerarla ilegal, pero el Ejecutivo regional catalán, con Mas a la cabeza, se las ingenió para celebrar la consulta convirtiéndola en un «proceso participativo».

La resolución del TSJC es la primera sentencia contra dirigentes independentistas catalanes desde que la norteña región de Cataluña puso en marcha su actual «hoja de ruta» para romper con España, que prevé la celebración de un referéndum secesionista unilateral para septiembre de este año.