El primer ministro británico, Boris Johnson, prometió un Reino Unido «abierto al exterior» tras el Brexit, en una declaración publicada antes de su participación en la cumbre del G7 en la localidad francesa de Biarritz.

«Mi mensaje a los líderes del G7 esta semana es el siguiente: el Reino Unido que yo dirijo será una nación internacional, abierta al exterior y segura de sí misma», escribió Johnson, quien se comprometió a sacar a su país de la Unión Europea el 31 de octubre, con o sin acuerdo con Bruselas.

La posibilidad de un Brexit brutal preocupa en los círculos empresariales, que temen sus caóticas consecuencias económicas, y divide a los británicos, incluso dentro del Partido Conservador de Johnson, una parte de cuyos miembros quieren mantener estrechos lazos con la Unión Europea.

«Algunas personas ponen en duda la decisión democrática tomada por el país, temiendo que nos retiremos del mundo», afirmó Johnson en referencia al referéndum de junio de 2016 en que 52% de británicos votó por salir de la UE.

«Algunos piensan que dejamos atrás los mejores días del Reino Unido. A esa gente les digo: se equivocan», agregó.

«Seguiremos en el corazón de las alianzas en todo el mundo. Y seguiremos poniendo todas nuestras capacidades diplomáticas, de defensa y de desarrollo al servicio del mantenimiento y la preservación del orden internacional, del que dependen la paz y la prosperidad», aseguró.

El primer ministro británico asegura asimismo que su país «nunca ignorará las responsabilidades particulares que le incumben como pilar y arquitecto del sistema internacional».

En los últimos días, Jonson mantuvo reuniones con la canciller alemana, Angela Merkel y el presidente francés Emmanuel Macron. Tras los encuentros el primer ministro británico advirtió que «no va a ser fácil» renegociar el acuerdo del Brexit, y pidió no «hacerse ilusiones demasiado pronto».

«Quiero advertir a todo el mundo, ¿de acuerdo? Porque esto no va a ser pan comido, esto no va a ser fácil. Vamos a tener que trabajar muy duro», afirmó.

Johnson recalcó que quiere acordar unas condiciones con la Unión Europea (UE) que permitan al Reino Unido al completo abandonar el bloque comunitario mientras se mantiene «un comercio sin fricciones en Irlanda del Norte».

«Hay muchos modos para asegurarnos de que eso es así. Pero persuadir a nuestros amigos y aliados de la Unión Europea, que tienen una posición muy, muy dura en contra de esto va a llevar algún tiempo», indicó.

«¡Yo quiero un acuerdo!», afirmó Johnson al llegar al patio central del parisino palacio del Elíseo en su habitual tono exultante, en el segundo «round» de su primera gira en el exterior desde que asumió su cargo a fines de julio. «Creo que podemos tener un acuerdo y, un buen acuerdo», en vistas de un Brexit el 31 de octubre, insistió.  «