La CGT será la primera en ser recibida formalmente en la mesa de reuniones que llevará a cabo en Gobierno Nacional para tratar de consensuar un proyecto que modifique el régimen de impuesto a las ganancias luego de la presión opositora en el Congreso.

En ese marco, durante este jueves la CGT tendrá la reunión formal de su Consejo Directivo. Más allá de lo que suceda en Azopardo 802, la cúpula de la CGT ya tiene fijada su postura. No habrá un aval expreso a lo que proponga el gobierno, ya que se mantendrá el discurso sobre la necesidad de eliminar el tributo. Sin embargo, los voceros de la central obrera señalan que será recibida como una buena noticia que menos trabajadores sean alcanzado con el tributo.

En tanto, los dirigentes sostienen que no volverán a tolerar una propuesta a largo plazo y que en caso de que no haya acuerdo apoyarán el proyecto que ya tuvo media sanción de la Cámara de Diputados.

Distintas fuentes sindicales le confirmaron a Tiempo que el diálogo con el gobierno se mantendrá y que irán con la mejor predisposición a escuchar lo que el Ejecutivo tenga que decir y aportaran para un proyecto de consenso.

Al mismo tiempo que se desarrollará mañana la Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte -que lideran Schmid y el ferroviario Omar Maturano-, tendrán su plenario y una conferencia de prensa para anunciar posibles medidas de fuerza. Los gremios del Transporte aparecen en el escenario como el sector más duro, en buena medida por ser el más afectado.

El titular de la Asociación Argentina de Aeronavegantes (AAA) y secretario de Juventud y Protección de la Niñez de la CGT, Juan Pablo Brey, ratificó que la CATT reclamó a los ministros de Transporte y Trabajo, Guillermo Dietrich y Jorge Triaca, respectivamente, «una inmediata solución a la demanda de exención del impuesto sobre viáticos, horas extras y feriados».

«Aún no hay nada. El gobierno solo podría contemplar en el futuro proyecto el tema de los viáticos. Pero no existen respuestas por los otros dos ítems. Por eso, los sindicatos que integran la CATT deben participar en la negociación de la nueva iniciativa, más allá de la obvia influencia de la CGT», puntualizó Brey.