El escándalo mundial que involucra a Facebook por el uso de su base de datos para la realización de campañas sucias, noticias falsas y manipulación de la opinión pública -como la que llevó a Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos, entre otras- tiene su conexión argentina.
El primer indicio surgió durante la investigación que llevó a cabo el canal británico Channel 4: en una de las cámaras ocultas, Alexander Nix -CEO Cambridge Analytica, la empresa apuntada por estos manejos-, mencionó los países donde habrían implementado su método para manipular elecciones: Nigeria, Kenia, República Checa y Argentina, entre otros. De hecho, la primera imagen del informe realizado por Channel 4 muestra a una mujer argentina festejando con un globo en la mano.

Cambridge Analytica quedó en el ojo de un huracán global luego de que se revelara que le pagó millones a Facebook para acceder a los datos privados de unos 50 millones de usuarios. El objetivo: personalizar los mensajes políticos. La compañía, con sede en Inglaterra, pertenece a SCL Group, una consultora política global que, según su página web, posee oficinas en una decena de países. Uno de ellos es, precisamente, la Argentina.

La sede de SCL Group en Buenos Aires está ubicada en Arenales 941, 5° A. Se trata de un departamento residencial, emplazado en una de las zonas más tradicionales de la aristocracia porteña. El teléfono está a nombre -y suele ser atendido- por Lucas Talamoni, un ex polista que provee servicios agropecuarios.

Talamoni y Nix se conocieron en las canchas de polo. Habitué de la Argentina desde hace dos décadas, el ejecutivo inglés -que en los 90 intentó abrir una consultora en el país- despunta su afición por el deporte favorito de la alcurnia doméstica conformando equipos con profesionales locales. En 2012, por caso, con los hermanos Nicolás y Lucas Talamoni formaron Libertines, que participó en la copa Eduardo Moore en la Royal County of Berkshire Polo Club, cerca de Windsor, en Gran Bretaña. Según los registros, perdieron los tres partidos que disputaron en primera ronda.

En esas jornadas de deporte, lujo y bosta conoció a Juan Pepa, un joven pampeano de intensa vida social. Con el muchacho, Nix formó Rubirosa Ltd., una firma con sede en Londres que ya fue disuelta. Pero el vínculo se mantiene: el ejecutivo británico es padrino de la Fundación Pro Alvear, una ONG con la que la familia Pepa se propone aportar al desarrollo educativo, económico y social de Intendente Alvear y otras localidades de La Pampa.

Como es usual en ese tipo de organizaciones, la ONG recauda fondos en eventos de gala donde participan personalidades del polo, la moda, los negocios y la política. Además de Nix, entre otros “padrinos” de Pro Alvear aparecen el polista y modelo Nacho Figueras, la modelo Valeria Mazza, la jugadora de hockey Luciana Aymar y hasta el actual presidente Mauricio Macri, que visitó la entidad en 2009, cuando aún gobernaba la Ciudad de Buenos Aires.

El informe elaborado por channel 4 sugiere que SCL Group habría operado en la Argentina. La voz en el teléfono que atiende en la oficina de Recoleta -que pide reserva de su identidad- lo desmiente: “Hubo contactos con políticos de distintos partidos, pero no se concretó nada”. Es sabido, sin embargo, que el macrismo hizo uso intensivo de las campañas sucias. Un ejemplo fue la falsa encuesta telefónica donde se difundió información apócrifa sobre el padre de Daniel Filmus, cuando el actual senador kirchnerista fue candidato a jefe de gobierno de la Ciudad. Ocurrió en 2012. En ese momento, el equipo de campaña del PRO rechazó haber orquestado la maniobra por la que resultó procesado el consultor ecuatoriano Jaime Durán Barba, asesor estrella del presidente. En 2015, el opo-oficialista Martín Lousteau también denunció haber sido víctima de una campaña sucia del macrismo.