La Escuela de Formación Política de Cambiemos en Hurlingham, para su tercer clase del año sorprendió este mediodía con el anuncio de la llegada de un disertante inesperado: “Mañana nos visita en la escuela un reconocido escritor, periodista y politólogo: Julio Bárbaro”, anunció ese espacio por medio de las redes sociales, e invitaba a concurrir este martes 24 de abril a la sede de Avenida Roca al 1300 a partir de las 19 horas.

Más allá de que ya pasaron por esa escuela en clases anteriores legisladores nacionales de Cambiemos, como el senador por Entre Ríos Alfredo de Angeli o el diputado por Córdoba Héctor Baldassi, entre otros, la posible disertación del flamante Coordinador Político del PJ nacional intervenido, a días de su designación por parte del interventor Luis Barrionuevo, levantó polvareda política, sobre todo en aquellos, dentro y fuera del partido, que conectan la intervención con una medida, de mínima, presuntamente funcional a los intereses del gobierno nacional.

Consultado por Tiempo, Bárbaro confirmó que no asistirá a la charla.

“Durante todo este tiempo fui a hablar adonde me invitaron. Los radicales, los del Pro. Quien me invite, voy. Peronistas, desde ya, empresarios. Voy donde me invitan. Y me habían invitado los del Pro a este lugar, donde hablé hace un par de años. Lo que pasa es que después vino el tema de la intervención del partido, mi compromiso, y esto me complicó y me limitó”, aseguró Bárbaro a Tiempo.

“No voy ir. Avisé porque también el cargo me compromete de otra manera. Si nuestra sociedad tuviera otra madurez, en esto me estoy limitando yo mismo. Pero dado el lugar que me invitaron a ocupar (NR: en la intervenció del PJ) esto cambia la repercusión”, anunció.

“Esto hace dos meses que me lo pidieron, son cosas que ellos organizan. Pero trajo ruido porque, bueno, son ruidos propios de una sociedad que ha tomado a la política como un espacio de confrontación. Yo quise heredar el abrazo de Perón con Balbín, y no tengo idea de los que piensan distinto sean enemigos y no adversarios”, enfatizó el Coordinador de los equipos políticos del intervenido PJ nacional.

Según pudo saber Tiempo de fuentes cercanas a la organización, hace dos años Bárbaro ya concurrió a una actividad similar en la misma sede partidaria y en esta ocasión se lo había invitado “un mes antes” de la intervención. Pero esta vez, habría sido el propio Luis Barrionuevo quien llamó a Bárbaro para decirle que no vaya “porque era un quilombo”, según fuentes cercanas a la organización.

Desde la organización insistieron en “este nuevo ciclo de la escuela arrancó hace 15 días con de Angeli y Baldassi y otros funcionarios, periodistas y dirigentes de todo el arco político”.

En estricto off the record, marcaron “Es importante tener un espacio de formación y reflexión más allá de la política. Lo de Bárbaro quedará para más adelante. Detalle, (el intendente) Juan Zabaleta también habló con Bárbaro para que se baje”, aseguraron.

Polémica y “dolor país”

“Si yo tuviera que decir algo, diría que me hubiera gustado vivir en un país donde hablar en la sede del otro partido fuera normal. No lo es porque vivimos una conflictividad en la política que nos obliga a que no lo sea. Me duele no poder ir”, aseguró Bárbaro a Tiempo.

“No tengo otra cosa que agradecer la invitación, y pedir perdón por las limitaciones políticas de nuestra realidad, de parte de ellos y nuestra, porque nadie se salva, que nos lleve a esta proliferación de la pequeñez a la que desgraciadamente nos hemos acostumbrado”, lamentó el ex Director Ejecutivo del extinto Comité Federal de Radiodifusión (Comfer).

“Tengo diálogo con todos. La semana pasada fui a Mendoza, Tucumán y Salta, y en ninguna hablé con el Pro. Voy donde me invitan”, insistió. “Tengo una actividad de charlas y conferencias intensas, y me siento agradecido de que me quieran invitar y escucharme porque, en el fondo, son más democráticos ellos que me invitan a mí a que hable, que algunos de los míos que creen que eso es traición a la Patria», dijo.

«Perón decía que no tenemos que ser sectarios ni excluyentes. El fanatismo siempre es el fruto de la inseguridad. Me duele el país que me lo impide”, concluyó Bárbaro.