La jueza de la Cámara Federal de Casación Penal Ana María Figueroa denunció que sufrió presiones en el ejercicio de sus funciones por parte del gobierno de Mauricio Macri. La magistrada –sin nombrarlo de modo explícito–sugirió que, en el marco de la causa del Memorándum con Irán, fue presionada por Juan Bautista Mahiques, exconsejero de la magistratura por el Ejecutivo durante la gestión Cambiemos. «En el gobierno anterior un funcionario que estaba por debajo del exministro de Justicia, Germán Garavano, entró a mi despacho para presionarme por la causa sobre el memorándum con Irán», comentó Figueroa en diálogo con AM750. “Le dije que el Poder Judicial era independiente y que no entraran más a mi despacho. A partir de ahí, no lo hicieron más personalmente, a través del poder político, pero sí a través de títulos de diarios», expresó la jueza. 

La repercusión de la declaración llegó de la mano de la vicepresidenta Cristina Fernández, quien recordó en su Twitter que Mahiques sigue en funciones, ahora con Horacio Rodríguez Larreta, “que lo propuso y designó como fiscal general de la Ciudad de Buenos Aires”. CFK se preguntó qué pensará de este funcionario que “aprieta a jueces y juezas para obtener fallos a la carta”. En tanto, Mahiques salió a desmentir la acusación. “Me gustaría que la jueza Figueroa aclarase que jamás acudí a su despacho”