En cuestión de días cambiará el modo de alquilar en la Argentina. En principio, a instancias de organizaciones sociales, el Senado había dado media sanción a un proyecto que daba respuestas a demandas históricas de los inquilinos. Cuando llegó a Diputados, el representante de Cambiemos, Daniel Lipovetsky, presidente de la comisión de Legislación Penal, resolvió archivarlo. En su lugar, el oficialismo impulsó otra ley que promueve precios de alquileres actualizados por Unidad de Valor Adquisitivo (UVA), y le da mayores responsabilidades a los inquilinos: por ejemplo, hacerse cargo de las reparaciones en las viviendas. El texto, que se aprobaría en estos días, habilita los desalojos express. Como forma de protesta, los inquilinos impulsan hoy a las 20 un “ruidazo” en diferentes esquinas de la Ciudad de Buenos Aires, donde casi un 40% alquila. 

«Es necesario tener una ley que proteja a la parte débil de la relación que son los inquilinos pero que sea equilibrada para no desalentar la oferta. Si no hay oferta de inmuebles el primero que se perjudica es el inquilino que no tiene inmuebles para poder alquilar. Creemos que la ley que hemos dictaminado hoy es más equilibrada que la que venía con media sanción en el Senado», sostuvo Lipovetsky al aprobarse el dictamen de Diputados a mitad de noviembre.

Sin embargo, para la agrupación Inquilinos Agrupados (IA), el proyecto promovido por Cambiemos fue confeccionado “a medida del mercado inmobiliario”. Gervasio Muñoz, titular de IA, y representante del Frente de Inquilinos Nacional, aseguró: “Necesitamos el apoyo de todos los inquilinos del país porque el proyecto del oficialismo plantea: que el precio de los alquileres se actualice por UVA, plazo mínimo del contrato de 2 años, expensas extraordinarias y arreglos de la vivienda a cargo del inquilino, rescisión anticipada con 5 meses de preaviso, negociación del próximo contrato con solo 30 días de anticipación y desalojo exprés. Si esta iniciativa prospera los 8 millones de inquilinos del país estaremos en una situación aún peor que la actual”. #RuidazoInquilino fue el hashtag elegido para las manifestaciones de hoy a las 20 en las principales esquinas porteñas: San Martín y Juan B. Justo; San Juan y Boedo; Acoyte y Rivadavia; Corrientes y Medrano; Scalabrini Ortiz y Corrientes, y Callao y Corrientes.

En el proyecto aprobado en Diputados, en ningún caso las inmobiliarias podrán cobrar más de un mes de comisión por la celebración del contrato, y medio mes cuando se trate de una renovación. El depósito exigido equivaldrá a un mes. También establece en su artículo 5º: “En el caso de las expensas, sólo podrá establecerse que estarán a cargo del locatario aquellas que deriven de gastos habituales que se reiteran en el tiempo, por períodos no superiores a los dos meses, independientemente de que sean considerados como expensas ordinarias o extraordinarias”.

La Ley de Alquileres que presentaron las organizaciones de inquilinos del país y que tuvo media sanción por unanimidad del Senado, proponía tres años como plazo de los contratos, y no los actuales dos, y un mecanismo de actualización de precios de los alquileres optativo. En caso de que los propietarios optaran por ajustar los precios, lo debían hacer a un índice promedio entre inflación y salario. “Ahora, haciéndolos UVA se tiene en cuenta únicamente la rentabilidad de los propietarios y no la posibilidad de pago de los inquilinos. Además, se incorpora el ‘desalojo exprés’, un artículo a medida del mercado inmobiliario”, agregan desde IA.

Otra organización que se manifestó sobre el cambio de proyecto impulsado por Cambiemos fue el  Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS), integrante del colectivo HABITAR Argentina: “Introduce algunas cuestiones significativas en el proceso de negociación de un contrato de locación e incorpora a la vivienda en alquiler  como parte de una política pública de reducción del déficit habitacional. Sin embargo mantiene una duración acotada del contrato de alquiler para vivienda familiar, ajusta el monto de los alquileres con un coeficiente de actualización apartado del índice de aumentos salariales y profundiza las herramientas legales para concretar desalojos”. Y se refieren a otro punto clave para un inquilino, como es el de la garantía: “se amplían las garantías que el locatario debe aceptar, aunque el monto que deben cubrir  (5 veces el valor mensual de la locación) resulta excesivo. El proyecto enumera alternativas posibles para garantizar el cumplimiento de las obligaciones del contrato, pero deja a criterio del propietario la elección de la más conveniente para sus intereses: tal como está redactado no tendría efecto práctico en la modificación de la situación abusiva a la que se enfrentan los inquilinos”.