En un marco teatral donde todos los días se estrenan nuevas obras, pocas propuestas logran escapar a una caducidad temprana. El unipersonal Yo, Encarnación Ezcurra, escrito por Cristina Escofet e interpretado por Lorena Vega, se destaca por su calidad y ya transita su segunda temporada en el Teatro del Pueblo.

Vega representa a Encarnación Ezcurra, la esposa de Juan Manuel de Rosas, a quien se le adjudica una histórica y soberana influencia sobre su marido. Encontrarse con el personaje es hacerlo en los últimos momentos de su breve pero intensa vida, rememorando el amor que lo une al Restaurador y que conservaría hasta su último aliento junto a este.

«No puedo estar más que contenta con lo que está sucediendo, con lo que hacemos. En relación a cuando debutamos, yo siento que estamos llegando a otro público. No sé si la repercusión tiene que ver con las buenas críticas que tuvimos o con el boca en boca que sucedió y que nos vino muy bien, pero lo concreto es que la gente nos viene a ver con atención y curiosidad. Todo ese entusiasmo permitió que nos fuéramos de gira por el interior del país, con una respuesta de la gente muy positiva”, dice Vega sobre lo bueno y lo mucho que sucede cuando se mete cada semana en la piel de Encarnación.

La actriz aclara que su personaje puede despertar controversias, sobre todo con quienes conocen de historia o que al menos tienen su propia visión de los hechos ocurridos en nuestro pasado: «Creo que sobre el escenario pude construir y desarrollar una mirada reflexiva sobre la figura que representó Encarnación. Al mismo tiempo, interpretarla es también un acto de mucha energía, porque fue una mujer muy intensa y activa, sin ningún tipo de medias tintas. Humildemente, creo que todo eso se siente en el escenario, en las miradas y en la tensión que experimenta el público. Ya en el terreno de lo particular, siento que hay una exigencia del personaje que me aborda pero que disfruto interpretar cada noche”.

Vega también reflexiona sobre la naturaleza de la obra y los tiempos que corren: «Más allá de que Yo, Encarnación Ezcurra fue escrita por una mujer que tiene una militancia comprobada de años con el feminismo, no creo que tengamos que hablar de una obra feminista. Tal vez en los tiempos en los que vivimos y con la importancia que tomó el movimiento en estos años, sí podría ser más que interesante para el feminismo. Es evidente que lo que se propone tiene una mirada que viene desde una mujer y sobre un personaje femenino, algo que no está puesto nunca en duda. En definitiva, creo que el personaje sobrepasa a los géneros; es importantísimo para nuestra historia, porque nos devela a un tipo de mujer especial de aquellos tiempos. Es muy interesante, si se quiere, ver los contrastes de lo que significaba ser mujer en aquella época y lo que representa en nuestros días».

La actriz tuvo que empaparse del personaje histórico para interpretar Yo, Encarnación Ezcurra. Para eso tuvo que desarrollar un trabajo de campo con el que admite estar íntimamente satisfecha. «Más allá de que conocía al personaje en cuestión, tuve que meterme en su historia y la de su tiempo para conocer todo más a fondo –revela–. Trabajar de esa forma me hizo tener más conciencia de cómo podía manejarme con ella y con las herramientas que tenía como actriz. Me puse a leer muchos libros, hice varias consultas con diversas personas para meterme más y mejor en el personaje. Finalmente el personaje me fue seduciendo sin darme cuenta.»

¿Cuándo?

Yo, Encarnación Ezcurra. Autora: Cristina Escofet. Actriz: Lorena Vega. Dirección: Andrés Bazzalo. Teatro del pueblo, Av. Roque Saénz Peña 943. Domingos a las 18.