Entre críticas al gobierno y a los gremios, las empresas anunciaron en el cierre de la semana que el pago del primer tramo del Salario Anual Complementario (SAC) se realizará mayoritariamente en cuotas. La decisión, con todo, se apoyó en la resolución anterior tomada por el gobierno nacional que definió pagar segmentadamente a sus trabajadores en sus diferentes niveles.

Por el lado empresarial, el argumento generalizado es el estado de las cuentas en el marco de la emergencia sanitaria, un cuadro que se habría agravado sin la ayuda estatal de los ATP.

En particular el comercio señaló a los supermercados, actividad esencial, como el único sector en condiciones de cumplir con la obligación de medio año de manera completa; el resto lo hará en un mínimo de dos y hasta tres pagos, según informaron dirigentes del sector.

Dirigentes industriales, por su parte, anunciaron que apenas el 25% de las empresas realizará el pago total, contra un 75% que, aseguran, presenta inconvenientes. Entre los pocos que pagarán no se encuentra la industria alimenticia pese a que es una de las que trabajó durante la cuarentena.

El Estado oficializó el martes 23, a través del Decreto 547/2020, su decisión de pagar el aguinaldo en cuotas a «la totalidad de los trabajadores dependientes del Sector Público Nacional». En concreto, la administración nacional pagará hasta $ 40 mil pesos brutos y el excedente se cubrirá en dos cuotas «iguales y consecutivas» con las remuneraciones de julio y agosto.

 La Ciudad de Buenos Aires y la provincia de Buenos Aires hicieron anuncios similares. El gobierno porteño pagará en cuotas el aguinaldo a empleados que cobran más de $50 mil brutos, el 30% de la planta. La administración de Axel Kicillof pagará en tres cuotas a los trabajadores con salarios de más de 80 mil pesos.

En todos estos casos, el justificativo fue la caída de la recaudación tributaria en el marco del avance del Covid-19.

Pymes, a medias

En diálogo con Tiempo, el dirigente Mario Grinman, secretario de la Cámara de Comercio y Servicios (CAC), puso en duda la posibilidad de que otras empresas mercantiles acompañen a los supermercados en el pago total de medio SAC. «Lo único seguro es que la mayoría no lo va a hacer», resumió el dirigente.

A la par, el vocero de la Cámara Argentina de la Mediana Empresa (Came), Pedro Cascales, anticipó que la mitad de los representados por esa entidad, que pertenecen a todo el universo pyme, tampoco cumplirá con el pago. «Es la proporción que cobró ATP para poder pagar los salarios de abril y mayo», explicó, unas 280 mil pymes.

Cascales lamentó que el gobierno decidió finalmente no aplicar al pago del aguinaldo el programa que financió la mitad de los salarios privados esos dos meses. «La única alternativa que nos quedó es que las pymes que tengan problemas acuerden en forma particular con cada trabajador en cuotas». La Came pidió los ATP para pagar los aguinaldos de los asalariados que cobran menos de $ 40.000 y para los que cobran más que eso intentó negociar un crédito que tampoco llegó a buen puerto.

Por el lado de la industria, Daniel Funes de Rioja, vicepresidente de la Unión Industrial Argentina (UIA), expresó al programa Salvemos Kamchatka de FM La Patriada, que sólo un cuarto de las fábricas está en condiciones de pagar el aguinaldo completo, a la par del 50% que no puede y de otro 25% que tiene capacidad para cubrir una parte.

Reacción de gremios

Los gremios reaccionaron con ambiguedad. Las dirigencias de la CGT y de la CTA se limitaron a declaraciones contrarias al pago en cuotas sin el acompañamiento de medidas de presión.

En la lista de los pronunciamientos aparecieron sindicatos importantes como la Asociación Bancaria, que repudió «la inconducente decisión» de las empresas del sector y de la administración pública; y el gremio de los trabajadores judiciales que conduce Julio Piumato, que lamentó que «ni (Domingo) Cavallo se atrevió a tanto» y planteó que la decisión retrotrae la situación laboral a la etapa previa al peronismo.

A título particular también habló el secretario General de los estacioneros y cosecretario de la CGT, Carlos Acuña, quien exhortó a las empresas a pagar todo el aguinaldo, pero no planteó qué hacer si las firmas no respetan esa indicación.