Docentes y padres comenzaron a difundir en las últimas horas los nuevos contenidos de los cuadernillos de la segunda edición del Operativo Aprender, tras una primera envuelta en polémicas, de las cuáles ésta edición no escapará. 

La iniciativa destinada a chicos de sexto grado y quinto año despertó el rechazo de las comunidades educativas de diferentes zonas del país, desde Capital y Provincia de Buenos Aires, hasta Tierra del Fuego, donde el Sindicato Unificado de Trabajadores de la Educación (SUTEF) efectúa un paro de 24 horas «para resistir la aplicación de estas políticas por parte del gobierno nacional, que servirán al Plan Maestro, nombre que dio el gobierno de Macri a la Reforma Educativa, que contiene los principales aspectos de la reforma laboral en la docencia». 



En la Escuela Normal Superior Antonio Mentruyt (Ensam) de Banfield, los alumnos tomaron las instalaciones para boicotear «este examen estandarizado, que se toma igual desde Jujuy hasta Lomas de Zamora, sin tener en cuenta las diferencias socio-culturales ni deja explayarse, porque es múltiple choice», aseguraron desde el Centro de Estudiantes. 

Precisamente, algunas preguntas del múltiple choice fueron las que despertaron las principales polémicas en las últimas horas. «Queremos saber cuántas veces los estudiantes de tu escuela: molestan a los que sacan buenas notas; molestan a los que les va mal; discriminan por alguna característica personal o familiar; roban; dañan las cosas de la escuela; insultan, amenazan o agreden a otros compañeros por redes sociales», es una de ellas. El chico debe elegir entre «siempre», «muchas veces», «pocas veces» y «nunca». 




También obligan a que el alumno acuse a su maestro, si escucha sus preguntas y no le responde; si no le vuelve a explicar cuando hay algo que no entiende; y si no lo felicita cuando hace algo bien.

Los padres son otros apuntados. El niño debe especificar dónde nació su padre, su madre e incluso él. «Argentina», «Bolivia», «Brasil», «Chile», «Paraguay», «Perú», «Uruguay», «Otros», «No sé», las opciones. Y además tiene que aclarar si sus padres fueron o no a la escuela, y si tienen primaria y secundaria completa. En otra pregunta, le piden que afirme qué cosas hay en el lugar donde vive: televisión por cable o satelital, computadora, heladera con freezer, lavarropa, microondas, aire acondicionado, calefacción. A pesar de que el gobierno dice que la encuesta es anónima, los cuadernillos incluyen la identificación de la escuela, el turno, el grado y el número de lista del estudiante.



En otro apartado contempla sólo «varón» y «mujer» como identidades de género. Y un cuestionario indica: «Hay tareas que tradicionalmente se consideran para hombres y otras para mujeres ¿Cuál de estos dibujos representa esta idea?». En un cuadro ella limpia con aspiradora y pañuelo en la cabeza y él construye, en otro ella lava y él ayuda en el baño, en otra es él el que está con el lavarropa. ¿Cuál será la que está en lo cierto, según el operativo del gobierno?