El seleccionado masculino de hockey argentino hizo historia: por primera vez podrán decir, orgullosos, que se suben a lo más alto del podio con una medalla de oro que les cuelga del cuello. Un logro que, además de inolvidable, pudo saldar una cuenta pendiente que mantienen Las Leonas, sus pares, sus colegas, sus compañeras que fueron las precursoras del ascenso de la actividad en el país.

Uno de los grandes responsables de este reconocimiento que muy pocos imaginaban es Carlos Retegui, el entrenador de Los Leones que en Londres 2012 se llevó la medalla de plata justamente como técnico de Las Leonas, que en estos Juegos Olímpicos rompieron su racha de estar en cuatro podios consecutivos. De la mano del Chapa alcanzaron una actuación increíble, que nunca siquiera se imaginó en las 22 actuaciones anteriores. Pero nada es casualidad: ocho jugadores de este equipo fueron campeones juveniles en Rotterdam, Holanda. Y allí se comenzó a germinar este sueño que empezó a convertirse en realidad cuando lograron el tercer puesto en el pasado Mundial La Haya 2014 y el título panamericano en Toronto, sólo hace un año.

Para demostrar la magnitud del título conseguido, el seleccionado masculino argentino de hockey registraba como la mejor marca en los Juegos Olímpicos el quinto puesto de Londres 1948. Las Leonas, en cambio, llevan quince años en los primeros planos, pero la medalla dorada se les sigue haciendo desear después de dos finales perdidas en Sydney 2000 y Londres 2012 y dos bronces en Atenas 2004 y en Beijing 2008.

Entre medio de ambos Juegos, las argentinas se subieron dos veces al tercer escalón del podio, pues fueron medalla de bronce en Atenas 2004 y Beijing 2008. La actual edición de Río fue para las chicas la peor decepción debido a que no alcanzaron las semifinales por primera vez en los últimos 16 años. Pero Los Leones, sus compañeros, lo lograron, con un título inolvidable.