El Tribunal Oral Federal (TOF) de Jujuy, que integran los jueces Mario Héctor Juárez Almaraz, Alejandra Cataldi y Federico Díaz, fijó para el 15, 19, 20 y 21 de diciembre el inicio del juicio oral contra Milagro Sala por un escrache contra el entonces senador Gerardo Morales en el Consejo de Ciencias Económicas en 2009.

Además de la dirigente social, presa desde comienzos de este año, están acusados Graciela López y Gustavo Salvatierra.

El ahora gobernador Morales acusó a la Sala de ser “autora intelectual” de la movilización a pesar de que la Tupac Amaru no participó.

“Mientras el TOF viene demorando y suspendiendo los juicios de lesa humanidad en la provincia, fijan audiencia en diciembre para esta causa. Es una provocación realizarla en una fecha tan simbólica y trágica para el país como lo es el 19 y 20 de diciembre donde el gobierno radical dejó 30 muertos en el país”, señaló la organización Tupac Amaru en un comunicado.

La referencia a los juicios por delitos de lesa humanidad tiene que ver con que los mismos jueces que realizarán el juicio oral ya suspendieron cuatro veces en las últimas semanas los alegatos en el marco del cuarto juicio que se realiza en Jujuy por delitos de la última dictadura y el inicio de la causa de la Noche del Apagón, que estaba fijada para el 9 de marzo y fue trasladado a marzo de 2017.

La defensa señaló que todavía está pendiente de resolución una queja interpuesta por el Ministerio Público Fiscal ante la Corte Suprema de la Nación por haber denegado sin razón la probation solicitada por la defensa en esta causa cuando estaban dados todos los requisitos legales.

La defensa de Milagro Sala reiteró que existe una clara intención política detrás de la causa. “No hay elementos probatorios que determinen la instigación a tirar huevos en los más de siete cuerpos que tiene la causa”, señalaron y agregaron que el expediente “ha ido y venido a la Corte Suprema en varias oportunidades impulsadas por Gerardo Morales con el propósito de tener cobertura mediática. La acusación sólo tiene un objetivo: estigmatizar a las organizaciones sociales y criminalizar la protesta social. No puede sostenerse una causa durante siete años, empleando recursos del Estado y del Poder Judicial por un escrache con unos huevos”.

Desde la Tupac Amaru, concluyeron: “Morales está desesperado por condenar a Milagro Sala. La institucionalidad democrática pende de un hilo si los jueces se someten a los caprichos de este contador que ha expuesto a la Argentina a un papelón internacional producto de su odio visceral contra una dirigente que ha construido dignidad para los más humildes”.

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