Ya pasaron casi 13 años del que tal vez haya sido el mayor golpe del deporte argentino en la historia. Parece que fue ayer el zurdazo de Manu Ginóbili sobre la chicharra ante Serbia, el segundo triunfo frente los NBA de Tim Duncan en semis o ver a Luifa Scola colgado del aro en la última jugada de la final con Italia para lograr el oro olímpico en Atenas 2004. Desde ese momento, esos doce héroes pasaron a la inmortalidad bajo el nombre de la Generación Dorada. Y tan eternos son que hasta el día de hoy varios de ellos se mantienen en actividad; no pueden ni quieren alejarse del básquet.

El caso más conocido es el de Emanuel Ginóbili, quien a los 39 años se reconstruyó para seguir con un rol de importancia en el megacampeón San Antonio Spurs de la NBA. La mayor sorpresa en estos días fue el regreso de Carlos Delfino, quien tras dos años y medio de inactividad, seis operaciones de pie izquierdo no se dio por vencido y tuvo su regalo en Río 2016. Ahora, el santafesino de 34 años firmó contrato con Boca hasta final de temporada en la Liga Nacional. El jueves pasado cumplió con su primer juego en el triunfo por 103-87 sobre La Unión de Formosa con ocho tantos y tres asistencias.

La LNB tiene dos dorados más: Leo Gutiérrez (38), que sigue rompiendo redes en Peñarol de Mar del Plata, y Walter Herrmann (37), que sacó campeón a San Lorenzo el año pasado y ahora muestra su capacidad goleadora en Obras Basket. Hay otros dos, ya retirados, que se mantienen ligados a la LNB y que forman parte de una de los proyectos más novedosos del deporte nacional, como es Bahía Basket. Juan Ignacio Sánchez (39) se hizo cargo como General Manager, una figura que no existía en la LNB, y apostó a la formación de jóvenes para construir el que hoy es el plantel más requerido por los equipos más poderosos del mundo. Al principio naufragó por temporadas de derrotas pero hoy es el único equipo argentino que logró meterse en el Final Four del Torneo de las Américas. El otro dorado es Alejandro Montecchia (45), quien es el asistente de lujo del técnico Sebastián Ginóbili. Ellos son los principales motores de un plantel que cuenta con proyectos como Lucio Redivo (se va al Baskonia de España), Juan Pablo Vaulet (drafteado por Brooklyn Nets) y Máximo Fjellerup (seguido de cerca por tres franquicias NBA).

El mismo Montecchia se encargó hace unos años de cumplir con una promesa que se había hecho. Los técnicos no reciben medallas de campeón y el Puma tomó la iniciativa y le hizo una réplica a Rubén Magnano (62). El cordobés, que abandonó el seleccionado tras Atenas, pasó varios años al mando del seleccionado de Brasil, al que logró instalarlo como una potencia y con una mentalidad ganadora. Hoy, Magnano es el coach de Trotamundos de Carabobo, uno de los equipos más populares de Venezuela. Todo un desafío para él.

El primer miembro de la GD en tomar la decisión del retiro fue Hugo Sconochini (45), nombrado por la mayoría del plantel como el verdadero motor del equipo. Sin dudas era el más experimentado: en Italia desde muy joven, fue repatriado por Magnano para liderar un equipo de jóvenes talentos hacia el éxito. Hugo, que fue conocido como el Jordan de Las Pampas, coqueteó con el micrófono como comentarista y hoy se luce en el circuito de padel en Italia, donde reside.

También como comentarista, y en actividad, está Fabricio Oberto (41), quien no solo aporta su conocimiento a las transmisiones NBA por ESPN sino también como conductor, ya que supo tener un programa de televisión en el que recorría la vida de grandes figuras en su intimidad. El lungo de Las Varillas, además, se presenta con su banda de rock y ahora se dedica a pasear por la Patagonia en motocicleta con su amigo Tim Duncan.

Otro ya retirado es Rubén Wolkowyski (43), que hasta hace poco se mantuvo activo en Quilmes de Mar del Plata, pero ya tiene quién lo reemplace, ya que su hijo Tomás (16 años, 2 metros de altura) fue fichado por el Unicaja Málaga de España.

En actividad

Además de Manu y el Lancha, hay otros tres GD que se mantienen en el mundo del básquet. Andrés Nocioni (37), tras su paso por la NBA, encontró su verdadero lugar en el mundo en el Real Madrid, donde apostaron a su personalidad ganadora y su garra para seguir en la elite. Y el Chapu, como siempre, respondió con ocho títulos, siendo protagonista principal de la liga más poderosa de Europa. Luis Scola (36), el gran capitán, fue cortado hace una semana por Brooklyn Nets luego de diez años en la liga estadounidense. Su nombre se baraja para reemplazar a Andrew Bogut en Cleveland Cavaliers, mientras que en Europa ya se cumplió la fecha límite de contrataciones para este año. Tres ligas más abajo que la LNB, se destaca Gabriel Fernández (40) en Huracán de San Justo. Así, los 12 héroes, los 12 oros, 13 años después, se mantienen en movimiento, no pueden alejar el básquet de sus cabezas, un hito, un deporte, que los marcó a fuego para toda su vida.