Era demasiado evidente que iba a pasar, sólo había que esperar cómo se iba a producir el desborde. La venta de adicionales a socios de Boca para el partido del sábado frente a River por la ida de la final de Copa Libertadores terminó, incluso, con la Infantería en la Bombonera. Algunos socios lo habían advertido, que todo se desarrollara de manera caótica colaboraría a los planes de Daniel Angelici de instalar la necesidad de un nuevo estadio par a Boca. ¿Por qué se sabía tan de antemano que sería problemático? Porque la demanda era alta y porque el club decidió no poner filtros para la compra de adicional. Es decir, podían ir a la cancha incluso los que no habían ido a ningún partido de Libertadores.

Ese punto fue lo que hizo estallar a muchos hinchas: que incluso aquellos que habían ido a todos los encuentros que se jugaron en la Bombonera por la Copa se quedaron afuera de la final. Las protestas se iniciaron primero en las redes. Pero luego fueron en la propia cancha de Boca, donde un grupo llegó hasta el lugar para que en la venta online del remanente se aplique el filtro. Se quejaban muchos hinchas, además, de que ni siquiera se sabía cuántas entradas se habían puesto a disposición a través de la web. Otros decían que el sistema no funcionó. Lo cierto es que muchos hinchas que habitualmente siguen a Boca se quedaron afuera.

El asunto se puso espeso. Hasta tal punto que algunos hinchas intentaron entrar por la fuerza al estadio. Ahí llegó la Policía. Eran las 14. Y con escudos trabaron el acceso al club. Pero la bronca por no poder estar en el Superclásico de todos los tiempos seguía.

Angelici reaccionó a los pocos minutos ante las críticas por el desmanejo en la venta de entradas. Primero se quejó por la presencia de hinchas en la Bombonera. Dijo que el sistema no se colgó, que la dirigencia no es la responsable. Y volvió, como lo advertían sectores de la oposición interna, con su gran caballito de batalla: dijo que Boca necesita un estadio para 80 mil personas. «El filtro se utiliza a sugerencia del comité de seguridad. En la Copa siempre hemos cobrado adicional y nunca aplicamos el filtro», aclaró Angelici en TyC Sports. Sin embargo, otros socios sostienen que eso no es así, que hubo filtro en varios partidos.

La bronca de los socios activos que quieren acceder al adicional se suma a la que ya demostraron los adherentes, aquellos que deben esperar hasta poder tener su entrada, cuando observaron que había reventa, incluso desde el hotel Boca. Angelici aclaró que 2000 entradas tienen que ir a Conmebol por distintos compromisos. La falta de transparencia también genera ira en los hinchas. Tickets quedan, bronca también.