El jefe de Gabinete, Marcos Peña, consideró este martes, en conferencia de prensa tras una reunión de Gabinete ampliado, que «es tan poco seria la ley» de reforma del Impuesto a las Ganancias aprobada por la oposición en Diputados que «pareciera que la hicieron solo para que la vetemos», y, aunque señaló que «todas las alternativas están abiertas», anticipó que, de ser sancionada, implicará «mayores restricciones fiscales para las provincias».

Peña agregó que “los números no cierran” con la propuesta de reforma del Impuesto a las Ganancias votada en la Cámara de Diputados y dijo que representa un “costo fiscal monumental que equivale prácticamente a toda la obra pública” prevista para el año próximo.

Además, explicó que el proyecto tiene «serias inconsistencias técnicas en muchos impuestos que se están creando» y que «son son sujetos a ser ser declarados inconstitucionales, o que sean incobrables».

Sin embargo, el presidente del bloque de diputados oficialista, Nicolás Massot, confirmó que “si hay consenso entre los gobernadores” en su apoyo al proyecto de reforma al Impuesto a las Ganancias, el gobierno “no puede hacer oídos sordos” y, por lo tanto, no vetará ley aunque ello signifique “morigerar las transferencias a las provincias”.