Edgardo Bauza mira el calendario, agarra una calculadora, comienza a hacer cuentas. Y no le dan los números. Desde Barcelona, la noticia que le llega al entrenador de la Selección es que Lionel Messi sufrió un desgarro en el aductor derecho y estará 21 días de baja. Pero para el inicio de la doble fecha de Eliminatorias faltan apenas dos semanas. Al Patón no le queda más que resignarse: el Diez no podrá jugar los partidos frente a Perú y Paraguay. De los cuatro encuentros que tendrá al frente del combinado nacional, sólo va a haber podido contar con el mejor del mundo en uno.

El rosarino se lesionó a los 15 minutos del segundo tiempo del empate 1-1 entre Barcelona y Atlético de Madrid: mientras disputaba una pelota con Diego Godín, Leo giró sobre su pierna derecha e inmediatamente sintió un dolor en la misma zona donde tenía las molestias que lo hicieron bajarse del encuentro contra Venezuela hace un par de semanas. A pesar de que le pidió a Luis Enrique continuar en la cancha, el entrenador lo reemplazó de inmediato por Arda Turán. El rostro de la Pulga en el banco de suplentes hacía presagiar la noticia que se confirmaría luego del partido. 

Para Messi es la segunda lesión de importancia del año y ambas terminaron por afectar a la Selección: en mayo, durante un amistoso contra Honduras, el zurdo recibió un fuerte golpe en la espalda que lo llevó a perderse el debut en la Copa América y recién le permitió jugar un partido completo en los cuartos de final del certamen. Además, los problemas físicos vienen complicando sobremanera al combinado nacional en el camino rumbo a Rusia: en lo que va de las Eliminatorias, el Diez solamente pudo jugar tres de los ocho partidos que disputó la Albiceleste. Ahora, a esa lista habrá que sumar otras dos ausencias.